Garantizar el abastecimiento alimenticio es una de las prioridades marcadas por el Gobierno en la crisis provocada por el coronavirus, y esta lógica exigencia está haciendo posible que la actividad económica se mantenga a flote en los municipios más poblados de las comarcas de O Salnés y Ulla-Umia.
La razón estriba en que la práctica totalidad de sus grandes empresas se dedican a la elaboración de conservas. Esta característica es también el motivo por el que otras factorías en las que trabajan centenares de operarios tampoco hayan sufrido restricciones, porque su labor es la elaboración de los envases que demanda.
Es lo que sucede en Clavo Food Factory, ubicada en Bemil (Caldas de Reis), que elabora conservas vegetales, o en la factoría de productos lácteos Clesa, situada en otra parroquia del mismo municipio, la de Saiar.
En el apartado de conservas de productos del mar acontece lo mismo, por lo que se mantienen los turnos y la actividad en las factorías de O Grove (Garavilla, Rons y Atunla). Lo mismo sucede en Fiscos, de Catoira, o en Portomar, situada en el puerto de Vilagarcía, mientras que la situación en las de Vilanova de Arousa y las ubicadas en el Polígono Industrial de O Salnés (Cambados) es la habitual, al igual que en los cocederos y en las depuradoras ubicadas en el litoral de la Ría de Arousa.
En el Polígono Industrial de Ribadumia está Mivisa, una firma que elabora envases para las conservas y dispone de factorías en varios lugares de España y del norte de África. Su ritmo de actividad no cambió a raíz de la irrupción del Covid-19; si acaso, se intensificó ligeramente.
En la superficie industrial de O Pousadoiro (Vilagarcía) está la empresa DS Smith (anteriormente, Lantero), en la que tampoco fue necesaria la implantación de un expediente de regulación temporal de empleo por el mismo motivo: el 80% de los envases de cartón que fabrica están destinados a productos alimenticios.
El Puerto de Vilagarcía es otro referente, y durante todo el periodo de vigencia del estado de alarma "ha trabajado con plena operatividad, por ser el transporte un servicio esencial y no sujeto a restricciones", indica esta institución.
"Por consiguiente, la entrada en la fase 0 de la desescalada no supone una variación sustancial con relación a la situación anterior de la Autoridad Portuaria, ya que no hubo en ningún momento suspensión de la actividad", añade en un comunicado hecho público ayer.
Tampoco afecta la crisis sanitaria a Foresa, que elabora colas en Caldas de Reis, mientras que Extrugasa, de Valga, detuvo su actividad industrial durante dos semanas, y de momento aún no cuenta con la totalidad de su plantilla, que se irá reincorporando paulatinamente.
