Sin techo y sin sustento. Esa es la situación actual de José Carlos Solla, un vecino de Xeve que fue desahuciado de la vivienda en la que residió en los últimos años por orden judicial el pasado jueves y que, desde entonces, duerme "en la calle. Algunos amigos me dejan ducharme en su casa, pero estoy desesperado".
Fruto de la desesperación de la que habla, Solla optó este lunes por iniciar "una huelga de hambre" que hizo visible sentándose, desde las once de la mañana, a las puertas del edificio judicial de A Parda. "No hay derecho a que me pase esto", dice. "La sentencia le dio la razón a mis hermanas y ahora no tengo nada".
El manifestante explicó que "yo cuidé a mi padre, que padecía alzhéimer, durante años, pero como tras fallecer no dejó testamento, al final fue la jueza la que resolvió en mi contra y le dio la vivienda a mis hermanas".
Sobre el desahucio, que fue ejecutado el jueves pasado, José Carlos explica que "aprovecharon un momento en el que salí para cambiar los bombillos y las cerraduras. Me quedé en la calle y sin nada".
"Estamos en un país que no defiende a los suyos. Estrasburgo dice que tienes que tener una vivienda digna. A mí me desahuciaron, me discriminaron, y no por impago. Yo estaba viviendo en la casa de mi padre. Una jueza decidió eso y yo estoy en la calle. Están enviando a personas a una muerte segura. La verdad es que necesito ayuda. Estoy sin casa y desesperado", relata.
ALUSIÓN A LA JUEZA. El manifestante añadió que "me dirijo a M.C.N.S., la jueza que me echó a la calle sin escrúpulo ninguno y, sinceramente, si no se cambian estas leyes, mucha otra gente pasará por lo mismo que yo", añade.
José Carlos, que mostraba un cartel reivindicativo, detalló que "sinceramente no lo sé. No encuentro ninguna ayuda por el hecho de ser un desahucio que no es por impago. No tengo ningún recurso económico. No me dejaron entrar en mi casa, se lo quedaron todo.
"No tengo ayudas ni subsidio alguno. Cuidé a mi padre durante cuatro años y eso no vale de nada. Voy directo a la muerte".
HUELGA. El vecino de Xeve anunció que iniciaba una huelga de hambre para intentar tocar la fibra sensible de las autoridades competentes, y explicó que no tiene ayuda de su familia, después de haber tenido algunos enfrentamientos con ella en el pasado.
"Me gustaría hablar con ellos para ver si me echan una mano".
PRECEDENTES. José Carlos Solla Blanco explicó a este periódico que "en agosto de 2007 mi madre se fue, le pidió el divorcio a mi padre y una manutención de 300 euros".
El único hijo varón del fallecido, exmiembro de La Legión, detalló que ante la nueva situación "un juez me hizo tutor legal de mi padre, y yo me dediqué a él por completo, preparándole los papeles de la incapacidad. En ningún momento me preocupé de que mi padre redactase un testamento y, en vista de lo que sucede ahora, creo que fui tonto por ello".
En todo caso, el blanco de las iras de este vecino de Xeve ya no son tanto sus familiares que le desahuciaron de la vivienda como las autoridades judiciales que, según él, no cumplen con el marco legal vigente en Europa.
