Adiós a Alberto Guerra, primer Rey Urco

Familiares y amigos despidieron en un sentido funeral a uno de los personajes icónicos del Entroido de Pontevedra
Alberto Guerra, caracterizado como el Rey Urco, junto al exalcalde Francisco Javier Cobián (izquierda) y en una imagen tomada en 2015. DP / DAVID FREIRE
photo_camera Alberto Guerra, caracterizado como el Rey Urco, junto al exalcalde Francisco Javier Cobián (izquierda) y en una imagen tomada en 2015. DP / DAVID FREIRE

Familia, amigos y conocidos despidieron ayer a Alberto Rodríguez Guerra, el primer Rey Urco del Entroido pontevedrés y un conocido y querido personaje de la ciudad. Falleció a los 69 años de edad y su marcha deja un recuerdo imborrable en la cultura y tradición pontevedresas. Representó el papel real en el carnaval durante dieciséis años, hasta el 2000, y solo unos problemas físicos le obligaron a renunciar a la que fue la actuación más sentida de toda su vida.

En una de sus últimas entrevistas, concedida al periodista Santy Mosteiro de Diario de Pontevedra, relataba su papel pionero en el primer Entroido lerezano celebrado en la calle, allá por 1984. "Todo se remonta al incendio ocurrido el 17 de diciembre de 1983 en la discoteca Alcalá 20, de Madrid, en el que fallecieron 82 personas –comentaba–. Los empresarios de las discotecas de Pontevedra tomaron nota de aquello y acordaron trasladar el Carnaval a la calle". Posiblemente el padre de la idea fuese Pepe Shiva, y junto a él estaban Peregrino Vázquez Pérez (DEP), José Manuel Brea (DEP) y Manuel Cabada". El cuarteto trasladó la idea a sus respectivas amistades hasta reunir a una docena de personas. "Digamos que ellos eran la clara y nosotros la yema, pero todos formábamos el mismo huevo", señalaba Alberto Guerra (como todo el mundo le conocía porque siempre renunció a utilizar su primer apellido).

Enemigo acérrimo de las nuevas tecnologías, aseguraba que en su casa nunca hubo un ordenador y que el número de su teléfono móvil solo lo conocían su mujer, su madre y su hermana. "No me gusta que me controlen", decía. Él mismo se definía como "un PTV de toda la vida, aunque algunos lo entiendan de otra manera".

Su constitución física hizo que a Alberto Guerra (que ya había hecho sus pinitos en el teatro) le asignasen el papel de Rey Urco en aquel primer carnaval. "Como siempre me gustó la temática militar, diseñé un traje acorde al personaje. También me preocupé de llevar un séquito armado con escudos, lanzas y cascos, porque no hay que olvidar que Urco es un rey guerrero que viene a invadir Pontevedra y que acaba enfrentándose con Teucro", comentaba él mismo en la entrevista publicada en Diario en febrero de 2015.

Entonces Alberto Guerra se mostraba dolido por el "ostracismo" al que decía que se ha condenado al rey del Carnaval pontevedrés, empezando por su cada vez menor presencia en los distintos actos. "Yo me vestía de Urco todos los días e iba por la zona vieja para crear ambiente. El día de los niños me pasaba tres horas con los chavales de arriba para abajo. Presidía el jurado los tres días de murgas. Iba al entierro de Ravachol. Estaba en todo", recordaba.

Rodríguez Guerra, inseparable de su pipa, falleció el pasado domingo. Este lunes se celebró su funeral en la parroquia Virgen del Camino, el primer día de la fase 2 del desconfinamiento, con una iglesia limitada en su aforo, pero repleta de cariño, amistad y solidaridad con sus familiares.