El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, se mostró sorprendido porque la obra para la ampliación de Montecelo, licitada por la Xunta, recibiese una única oferta, la Unión de Empresas Temporales formada por Acciona y Veolia. "Non é unha boa cousa", dijo este miércoles el regidor nacionalista a preguntas de los periodistas.
Al regidor nacionalista le "extraña" que no se hubiesen presentado más constructoras a este concurso público. "Será que non o viran claro", indicó. "A min chámame a atención, pero tampouco analicei o prego en profundidade. Chama a atención que sexa unha soa. A única explicación que pode ter é que vai demasiado axustado e que non lles saen as contas", añadió.
La Xunta se juega a una sola carta el mayor contrato de una obra pública en Pontevedra. "Sempre é máis positivo que haxa máis proxectos para elixir", recordó el alcalde.
El proyecto de Gran Montecelo cuenta con un presupuesto inicial de 114.651.249,81 euros. En los pliegos, las empresas que quisieran acceder a este proyecto debían presentar ante el órgano de contratación una garantía del 5% del coste total de la licitación, sin impuestos, lo que se traduciría en algo más de 4,7 millones de euros.
Además de cumplir con los requisitos documentales y técnicos, Acciona y Veolia también deberán superar el filtro económico, que es el que garantiza que las ofertas que se presentan no entran en baja temeraria. Sobre todas estas cuestiones deberá pronunciarse la Mesa de Contratación de la Xunta, que está formada por técnicos.
CARACTERÍSTICAS. El Gran Montecelo aumentará la cartera de servicios que actualmente presta el Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (Chup). Entre las nuevas unidades asistenciales figuran la Oncoloxía Radioterápica y el diagnóstico por imagen de Medicina Nuclear. También se apostará por la humanización del área de partos.
El proyecto contempla la creación de una Uci Pediátrica y para Neonatos y el refuerzo de áreas como, por ejemplo, las que tratan enfermedades relacionadas con el corazón y con el aparato digestivo.
La capacidad del centro también aumentará. El número de camas pasará de 600 a 720 y más de la mitad serán estancias individuales. Además, las urgencias ya no estarán separadas en dos hospitales, como ocurre en la actualidad. Ocuparán un único espacio en el nuevo edificio y tendrán una única puerta de entrada.
Pontevedra ofrece la Casa da Cultura de la parroquia para que se restablezca el servicio médico, pero el Sergas parece optar por la biblioteca. "O que parece que hai aquí é un problema de persoal e non de dependencias", afirmó Lores.
