Amazon, el gran 'súper' que reparte unos 1.200 paquetes diarios en Pontevedra

Un estudio del economista Santiago Boullosa analiza el impacto del gigante de internet

Un repartidor de paquetería en el centro de Pontevedra. RAFA FARIÑA
photo_camera Un repartidor de paquetería en el centro de Pontevedra. RAFA FARIÑA

Que las compras por internet han aumentado en los últimos años es algo que ya nadie duda. La comodidad de hacerlo desde casa, los precios (en muchas ocasiones más competitivos que en tiendas físicas) y la mejora en los tiempos de reparto atraen a muchas personas. Lo ratifica el Instituto Nacional de Estadística (Ine), que en su última Encuesta sobre uso de tecnologías de información y comunicación en los hogares cifra en 839.796 los ciudadanos de la comunidad (de 16 a 74 años) que compraron por Internet durante 2017: tres de cada diez gallegos.

Precisamente por esa realidad innegable, el economista Santiago Boullosa ha coordinado un estudio para analizar cuál es el impacto de Amazon en la ciudad de Pontevedra y cómo podría llegar a afectar al comercio local. "Los comerciantes no llegan a saber cuál es su impacto. Algunos piensan que vende poco, que es algo de determinados sectores como la tecnología...", explica.

Así, mediante encuestas realizadas a lo largo de la primera semana de junio entre repartidores de paquetería de las diferentes empresas que trabajan en la ciudad, ha estimado que cada día se reparten alrededor de 1.200 paquetes solo en el límite municipal de Pontevedra, sin contar con aquellos "que no están identificados con la paquetería de Amazon".

De este estudio se desprende que Correos es la empresa más utilizada para repartir las compras de Amazon en la ciudad, copando más del 50% del total entre sus servicios de repartidores ordinarios y de Correos Express. Le siguen Seur, con un 17% , Tourline Express, con el 9%, y, en menor medida, otras empresas de paquetería como GLS, MRW, UPS y DHL.

Correos es la empresa que más reparte, con más del 50%, seguida de Seur, con el 17%, y Toruline Express, con el 9%

"Este es el número de ventas que se deja de hacer cada día en el comercio de la ciudad", denuncia Boullosa, que compara la situación con la que ya se produjo en Estados Unidos "donde Amazon crece de forma imparable y tuvo una importancia muy grande en la desaparición de miles y miles de comercios".

Ese mismo ejemplo usa el presidente del CCU Zona Monumental de Pontevedra, Miguel Lago, que recuerda la noticia que saltó a los medios el pasado año. "En EE UU han cerrado centros comerciales por la incursión de empresas como Amazon, por lo que hay que temer este tipo de ventas. Lo que estamos viendo es solo la punta del iceberg". Lago considera que es muy cómodo estar en casa, hacer un pedido y "no ir al comercio que tienes al lado", algo que lleva a un doble beneficio: "Por un lado, estás dando trabajo a tus conciudadanos y, por otro, creas ciudad porque los locales no están vacíos. Un menor consumo en tu ciudad redunda en el empleo", asegura.

Sin embargo, mientras que Boullosa considera que los comercios locales "no tienen manera de vender por Internet, porque es un mar tan grande y tan inmenso que solamente los grandes consiguen vender algo", Lago lo ve de otra manera y, aunque considera que es "muy difícil luchar", distingue entre dos tipos de comerciantes. "Un comerciante fabricante, que a lo mejor hace pareos o cosas propias con un estampado especial, tiene su producto en exclusiva. Pero si eres un comerciante multimarca lo tienes difícil, luchas en el mercado abierto con la propia marca en otros lugares".

El presidente del CCU Zona Monumental, considera que el problema para luchar contra gigantes como Amazon no es el precio, sino cómo lo están haciendo: su logística, "muy rápida", y su política de devoluciones, algo que también destaca Boullosa. "El cliente final es el gran favorecido. Si no te gusta un artículo lo devuelves sin tener que dar más explicación. Quien se lo come es el fabricante o el vendedor que tiene el producto en Amazon, porque a ellos le da exactamente igual quedarse con él que devolvértelo".

Este economista pontevedrés considera que el siguiente paso tras analizar el impacto de Amazon en la ciudad, es continuar con más estudios y, sobre todo, "tratar de saber cuáles son los hábitos de compra de los consumidores y cómo mejorar la experiencia de compra para beneficiar al pequeño comercio".

Sin embargo, Miguel Lago considera que no está todo perdido y cree que es "una cuestión de modas. En mi época cogíamos el tren e íbamos a Vigo a El Corte Inglés y ahora a nadie se le ocurre". Así, piensa que "terndrá un tope, habrá una saturación en el mercado y empezará a descender". En su opinión, "el centro de la ciudad seguirá siendo el centro, porque la proximidad y el vecino lo tienes al lado. Podrá tener mayor incidencia dependiendo de las modas, pero los más dañados van a ser los centros comerciales periféricos".

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