Una cosa es acceder a la Red de redes y otra bien distintas hacerlo en condiciones óptimas de velocidad y seguridad. No en todas partes existe un servicio de Internet capaz de trasladar un puesto de trabajo hasta ese punto sin miedo a fracasar.
A día de hoy, cuando las grandes ciudades españolas comienzan a preparar sus proyectos piloto para el esperado 5G o ‘Internet de las cosas’, hay decenas de localidades en Galicia donde el acceso a la Red es todavía una quimera.
El esfuerzo inversor desarrollado en los últimos diez años ha permitido llevar Internet hasta pequeñas aldeas y localidades donde hasta hace poco no llegaban ni siquiera las líneas telefónicas.
Pero todavía hoy, a muy poca distancia de capitales de provincia, hay miles de ciudadanos sin acceso a una banda ancha que les permita utilizar la Red como verdadera herramienta de trabajo.
Uno de cada cinco gallegos no tiene acceso a las bandas anchas. 513.000 vecinos de 309 concellos de la comunidad autónoma carecen de redes ultrarrápidas. Todos ellos están integrados en un plan de la Xunta, confinanciado con fondos Feader y ejecutado por Telefónica, para llevar la cobertura de cien megabytes por segundo hasta todos ellos en el año 2020.
El mismo plan se aplicará a más de 64.000 vecinos de 191 núcleos de los concellos de Barro, Bueu, Campo Lameiro, Cangas, Cerdedo-Cotobade, A Illa de Arousa, Lalín, A Lama, Marín, Poio, Ponte Caldelas, Pontevedra, Sanxenxo, Vilaboa, Vilagarcía de Arousa e Vilanova de Arousa. En todos ellos hay deficiencias serias del servicio y no será hasta 2020 cuando se les garantice un acceso a redes ultrarrápidas.
En el caso de los concellos, la Xunta impulsa despliegues de fibra óptica en un total de 33 núcleos de población. De ello se beneficiarán más de 3.800 ciudadanos. Junto a este programa autonómico, el Estado hará lo mismo en otros 280 núcleos con un total de 60.300 vecinos. Los plazos serán progresivos, pero siempre en 2020.
Al margen de los núcleos poblados, están también algunas ubicaciones empresariales donde la cobertura de Internet provoca serios desajustes y una evidente falta de competitividad.
En realidad, el programa de extensión de fibra para núcleos de población es la tercera actuación del Plan de Banda Larga de la Xunta. Están, por otra parte, la extensión de la banda ancha para los polígonos industriales y las de empresas aisladas del rural.
Este año, en colaboración con el operador R en este caso, se completó la conexión de un total de 81 polígonos industriais en toda Galicia, con redes de hasta 350 Megabytes por segundo, que sumados a los que ya cuentan con redes ultrarrápidas confirmarán un total de 131 superficies empresariales cubiertas, lo que que representa el 93% da superficie empresarial ocupada.
En la provincia, los parques empresariales de O Campiño, A Reigosa (Ponte Caldelas), O Pousadoiro (Vilagarcía, Vilanova de Arousa, Bueu-Castiñeiras, A Portela (Cangas), Botos (Lalín), Bamio (Vilagarcía) e Tremoedo (Vilanova) ya cuentan con estas redes.
