El conflicto sanitario es un debate endémico entre los profesionales y la Administración sanitaria para mantener la calidad en los servicios de Atención Primaria. Isidro Lago Barreiro, nuevo presidente Colegio de Médicos de Pontevedra, tras doce años como vicepresidente. El especialista en Ginecología llega con experiencia y firmes apuestas para intentar mejorar las condiciones de trabajo de los profesionales, la temporalidad o el tiempo de consulta de los pacientes.
¿Cómo afronta esta nueva etapa en la presidencia de la organización colegial pontevedresa?
La afronto con ganas. Estoy muy satisfecho con el recorrido de la organización hasta ahora. Después de doce años en la vicepresidencia, esta elección no me pilla de sorpresa y estaré aquí para defender a los médicos en todo momento. El problema más urgente ahora mismo es la Atención Primaria. Desde el Colegio luchamos por las dificultades que acarrean los puntos de atención continuada (PAC), que deberían contar con personal y medios adecuados a las necesidades del paciente. Los médicos deben tener las cualificaciones y titulaciones que correspondan.
¿Cuáles son las principales apuestas sanitarias de la entidad?
Sin duda, ahora mismo debemos centrar nuestros esfuerzos en la Atención Primaria, pues es una piedra en el zapato que nos lleva dando problemas desde hace mucho tiempo y todavía está sin solucionar. Los centros de salud no cuentan con los recursos que deberían. La clave está en el presupuesto destinado al sector que, por desgracia, no es suficiente. Otra de las grandes apuestas es crear una agenda adaptada a cada paciente que controle el tiempo de consulta y no perder calidad en el servicio médico.
Desde el Colegio demandan incentivos para afrontar la escasez de médicos. Tras las protestas de los últimos meses, ¿han notado alguna mejoría?
Después de las manifestaciones del EOXI de Vigo sí que hubo un cambio de dirección, pues parecía que comenzaban a fluir las conversaciones para mejorar la situación de huelga. Pero realmente la preocupación de los profesionales continúa, nada ha cambiado. Con el déficit de sanitarios es muy difícil controlar la situación, la sanidad está desbordada. Por eso exigimos contratos de larga duración y que las convocatorias de plazas sean reales, porque se convocan menos de las que realmente se necesitan.
Las conversaciones con la administración, no han mejorado el colapso sanitario, los profesionales seguimos preocupados
¿Cuánto puede aguantar así esta situación de colapso sanitario?
Si aguanta es gracias a los profesionales que lo están dando todo sin ninguna compensación ni mejora a largo plazo. La presión a los médicos crea una situación inaguantable de tensión, están trabajando al límite de sus posibilidades. La gente necesita unos contratos que no se ciñan a la temporalidad.
¿Esa sobrecarga está provocando una 'fuga de cerebros'?
Sí. El descontento en busca de contratos de larga duración, mejores condiciones y consideración social en otros países como Portugal hace que muchos tengan que irse. La mayoría desea trabajar donde vive, si tiene buenas condiciones se quedará. La sobrecarga de los sanitarios es el gran problema, no se pueden tolerar las contrataciones basura y ajustadas a un tiempo de asistencia sanitaria incorrecta en la Atención Primaria. Solo pedimos buena medicina.
El problema estructural del sistema médico deriva a los pacientes de la Atención Primaria a Urgencias. ¿Es un bucle sin salida?
Exacto. Si el paciente tiene una buena asistencia en el PAC no va a acudir a urgencias. De este modo el sistema funcionaría. Pero el tiempo de consulta es limitado y tienes que volver, es la pescadilla que se muerde la cola. Con que una de las partes falle, todo se desmorona. Por eso nosotros reivindicamos que el sistema funcione porque puede funcionar. Nuestra sanidad es la envidia de otros países, solo se necesita voluntad y sentarse a tomar medidas.
En Galicia la dispersión poblacional es un gran problema, pues provoca la sobrecarga de algunos centros de salud costeros. En verano los turistas llegan en masa a la costa gallega y esto incrementa el trabajo de los sanitarios en estas zonas. Tenemos que plantear que todos los PAC estén cubiertos equitativamente para no sobrecargar unos y otros no. Los PAC tienen poca dotación de medios y los profesionales no pueden aguantar este estado límite.
¿Cómo se soluciona?
La Xunta debe ser consciente de la situación y poner de su parte porque con la financiación económica adecuada y con voluntad política todo funciona. Debe dar salida a todos esos profesionales bien formados de nuestra comunidad y, que por desgracia, se están quedando a las puertas.
