La crisis de Celso Míguez se agrava. La CIG denunció este martes que la firma, dedicada a la comercialización de pintura, acaba de anunciar que presentará un concurso de acreedores y despedirá a 25 trabajadores, lo que equivaldría a la mitad de la plantilla, formada por 50 personas.
La central nacionalista reprochó la actitud de la dirección de la firma, que habría acusado al comité de ser los culpables de las deudas salariales que ha contraído con sus empleados.
El pasado mes de febrero, el personal se manifestó por Pontevedra para hacer visible su situación. Entonces denunciaban que Celso Míguez no les había abonado la extra de Navidad y de julio y tres nóminas.
Después de varios tiras y aflojas, parte social y patronal retomaron el diálogo para tratar de encauzar la situación. "A empresa segue a negar que a situación actual estea derivada dunha mala xestión, e di que os impagos de salario (acumula cinco nóminas e dúas pagas extra sen aboar) están motivados pola conflitividade dos dous últimos meses, cando o certo é que a compañía leva anos acumulando débeda", denunciaron ayer responsables de CIG-Servizos a través de un comunicado de prensa. En él señalan que seguirán defendiendo la continuidad de todo el personal.
En este caso, el sindicato asesora a 14 trabajadores: 13 en Pontevedra y uno en Lugo. Todos ellos presentaron demandas judiciales para reclamar la rescisión de los contratos y el cobro de las nóminas atrasadas. El juicio de Lugo se celebró ayer, el de Pontevedra sigue sin fecha.