Llega la revolución de los 'nuevos mayores'

El perfil de los mayores ha mutado a pasos agigantados y hoy muestra una actitud mucho más activa que la de hace unos años ► El cambio ha motivado la puesta en marcha de nuevos servicios, como el programa Vive la Vida de Abanca, que alberga viajes "a precios exclusivos", planes para la vivienda, teleasistencia y productos financieros para mayores de 55 años. El universo del termalismo se transforma para dar cabida a "las nuevas demandas" de los usuarios
Ana Belén Rodríguez, María Josefa Crespo,  Carmen Fernández, Sabela Couceiro y Eva María Graña en el café de redacción celebrado en Diario de Ponteveda. GONZALO GARCÍA
photo_camera Ana Belén Rodríguez, María Josefa Crespo, Carmen Fernández, Sabela Couceiro y Eva María Graña en el café de redacción celebrado en Diario de Ponteveda. GONZALO GARCÍA

La senectud afronta su mayor transformación, de eso no hay duda. Los mayores de hoy apenas guardan similitudes con los de hace unas décadas y, lejos de mantener una actitud pasiva, han hecho suyo el lema de carpe diem (aprovecha cada día). Ahora "viajan más", siguen el paso de las nuevas tecnologías y ocupan su tiempo libre con un sinfín de actividades para mantenerse en forma el cuerpo y la mente. El cambio de comportamiento ha transformado sus hábitos, pero también está dando lugar a la puesta de marcha de nuevos servicios que Diario de Pontevedra ha querido analizar en un café de redacción junto a representantes del mundo empresa y del ámbito ciudadano.

La directora territorial de Abanca en Pontevedra, Carmen Fernández Penas, presentó en el encuentro uno de los ejemplos más recientes de cómo la iniciativa privada se está adaptando a la actualización de las generaciones con más recorrido. Se trata del programa Vive la Vida, "un paquete de productos y servicios, tanto financieros como no financieros, que han sido diseñados para ofrecer una solución global a las demandas y necesidades del colectivo de personas mayores, que está protagonizando un cambio social y redefiniendo esta etapa de la vida".

Carmen Fernández, directora territorial de Abanca: "El colectivo de mayores de 55 años es absolutamente prioritario y estratégico para Abanca"

El programa se encuentra "en fase de lanzamiento" y su principal objetivo es "ofrecer nuevas opciones" a los mayores de 55 años, un colectivo cada vez más numeroso. Solo en el municipio pontevedrés hay constancia de 28.200 habitantes que superan esta franja de edad y que ya representan el 34% de la población. Y para Abanca conforma un colectivo merece todas las atenciones. Según precisa Carmen Fernández, "la entidad cuenta con más de 850.000 clientes mayores de 55 años, por lo que es el segmento más numeroso en el banco".

NUEVAS OPORTUNIDADES. El programa Vive la Vida está estructurado en cuatro grandes bloques que abarcan servicios de ocio y disfrute del tiempo libre, actividades de crecimiento personal, asistencia y asesoramiento legal, y soluciones financieras. Así, entre otras muchas opciones, los usuarios pueden acceder a ofertas de viajes con guía y pensión completa a "precios exclusivos", cursos de formación, seguros de dependencia, servicios de teleasistencia e incluso soluciones relacionadas con la vivienda. Un ejemplo de esto es el servicio de asesoramiento especializado Escogecasa, que ayuda a rentabilizar la vivienda en propiedad, ya sea para la adquisición de otra más pequeña o por necesidades de liquidez.

Ana Belén Rodríguez, responsable de Vive la Vida: "Pretendemos una oferta de servicios más amplia que la estrictamente financiera"

Para acceder al programa "no hace falta pagar cuotas, tan solo ser cliente de Abanca". "Es un programa estratégico para el banco, que supone un paso más en nuestro compromiso histórico con las personas mayores, que se caracterizan por tener un perfil más activo e independiente y unas expectativas de vida más largas", subraya Fernández.

El plan fue diseñado en colaboración con la Obra Social de Abanca, Afundación, la institución sin ánimo de lucro que apadrina y financia la entidad bancaria. En el caso de Pontevedra dicha entidad cuenta con un Espazo +60 en el Café Moderno (Praza San José), donde desarrolla múltiples actividades que promueven el envejecimiento activo. En la actualidad cuenta con cerca de 1.500 socios (el 70% mujeres) que han presenciado y forzado un giro de tuerca en la programación. "Hemos trabajado con Abanca en un cambio de perspectiva, para que en lugar de hablar de envejecimiento pongamos el acento en la revolución de la longevidad. Debemos prepararnos para una vida más larga y este programa (Vive la Vida) es un ejemplo de que se pueden generar servicios y recursos frente a un fenómeno que se verá ampliado", explica la coordinadora del área, Sabela Couceiro Núñez.

Sabela Couceiro, coordinadora de Afundación: "Hemos trabajado en un cambio de perspectiva para poner el acento en la revolución de la longevidad"

Según añade, el centro está recepcionando nuevas generaciones de 'veteranos' que, además de querer ocupar su tiempo libre, "quieren seguir aportando" a la sociedad, ya sea mediante iniciativas de voluntariado como de masterclas sobre áreas que dominan.

NUEVAS EXIGENCIAS. Las Termas de Cuntis conocidas por ser el mayor hotel balneario en Pontevedra, también están siendo testigo de primera línea de este cambio de perfil. El negocio que antes estaba centrado en personas añosas que acudían al centro con fines terapéuticos ha tenido que "adaptarse" al nuevo prototipo de cliente: particulares que "cada vez son más jóvenes" y que ya no buscan únicamente sanar el cuerpo, sino también reforzar el bienestar y cultivar la belleza. "Vienen más a relajarse y a mimarse un poco con nuestros tratamientos. Además, ahora nos piden animación y excursiones para reforzar la vertiente cultural. Los que vienen por estancias largas salen casi todos los días", indica la encargada de las Termas, Eva María Graña Caramés.

La empresa ha tenido que adaptar sus instalaciones y horarios a las "nuevas demandas de los usuarios", que no son pocos. "Al año podemos registrar más de 5.000 personas mayores que pasan estancias largas en el complejo, de más de siete días. Y otros 20.000 usuarios acuden a través de planes más puntuales". Gran parte de la clientela accede al centro mediante los planes de ocio del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) y muchos otros a través de los programas de termalismo de concellos y diputaciones. El nexo común es que "hoy ya no priman las aguas, sino las instalaciones y los servicios".

Eva María Graña Caramés, encargada de Termas de Cuntis: "Hoy ya no priman las aguas termales, sino las instalaciones y los servicios"

APOYO PSICOLÓGICO. Desde el punto de vista del usuario, María Josefa Crespo Amigo, cliente de ABANCA colectivo +55, asegura que los programas que ofrece la entidad bancaria ayudan a paliar el vacío con el que se topan los que llegan a la jubilación. "Mucha gente se queda en soledad y gracias a estos programas pueden tener una vida más activa y estar en mejores condiciones a nivel psicológico". Por eso, espera que programas como el de Vive la Vida tengan un largo recorrido. "Porque aparte de las actividades en sí, estas acciones te estimulan y te hacen convivir con más gente".

La responsable del programa Vive la Vida de Abanca, Ana Belén Rodríguez Durán, explica que la iniciativa surgió a raíz de una "demanda interna y externa". Por un lado, para dar respuesta al cambio de comportamiento de las personas mayores, "especialmente los que están a punto de jubilarse o que ya lo han hecho, y que son mucho más activos que los mayores de antes". Y por otro lado, para cubrir espacios demandados por la propia clientela, teniendo en cuenta de que "el peso del colectivo es trascendental". "A raíz de esto pusimos en marcha un plan de investigación con Afundación para ver cuáles eran las demandas de este segmento de la población y qué se podía hacer para satisfacerlas. Como resultado salieron unas conclusiones, que usamos de base para configurar la oferta del programa".

María José Crespo, usuaria del plan +55: "Gracias a estos programas mucha gente puede tener una vida más activa"

El plan alberga más de 20 productos y servicios que dan cobertura a necesidades que traspasan el área bancaria. "Ya que tenemos esa cercanía y ese conocimiento de esta parte de la población, lo que pretendemos es que nos vean como una oferta de servicios más amplia que la estrictamente financiera", concluye Rodríguez.

ENTIDAD DE REFERENCIA. En este contexto la directora territorial Carmen Fernández, incidió en que Abanca es "la entidad financiera de referencia para el colectivo de personas mayores en Galicia", avalada por múltiples cifras objetivas. "Una de cada dos pensiones gallegas están domiciliadas en Abanca y, de hecho, somos la única entidad que presta servicios financieros en 100 municipios, algo que agradecen mucho las personas mayores. La capilaridad de nuestra red comercial nos permite dar cobertura a más del 98% de la población en Galicia".

La franja de población que supera los 55 años representa para Abanca "un segmento de clientes estratégico, que tiene un peso muy significativo en las distintas líneas de captación del banco". Para ser más exactos, los usuarios de más de 55 años representan el 64% del volumen de planes de pensiones que tiene activos la entidad bancaria, así como el 46% de fondos de inversión, el 40% de depósitos a plazo y el 31% de depósitos a la vista.

A la falta de conocer el impacto real del programa Vive la Vida, que apenas lleva unas semanas en el mercado, Fernández se muestra "convencida de que tendrá un "rotundo éxito, por la evolución del colectivo, porque hay demanda y por la estrecha relación con la labor social de Abanca".

Una programación actualizada de forma constante

Afundación ofrece en sus instalaciones del Café Moderno múltiples actividades dirigidas a personas mayores, entre las que se encuentran propuestas de ejercicio físico, salud cognitiva, aprendizaje, voluntariado y cultura digital. PIlates e idiomas forman parte de las más demandandas. 

La programación es actualizada de forma constante, en base a las necesidades que detectan los responsables del área y las propias propuestas de los usuarios, que cada vez interactúan con un carácter más proactivo. "Estamos recibiendo a un conjunto de personas que han sido activivistas y que no se conforman con la imagen pasiva que se asocia a los mayores. Muchos se ofrecen para compartir sus conocimientos con los demás como, por ejemplo, ingenieros que quieren impartir cursos de electricidad (...) Obviamente, nuestra actitud es receptiva. Es un lujo tener proposiciones de este tipo, no podemos desaprovecharlas", explica la coordinadora del área de Envejecimiento Activo de Afundación Sabela Couceiro.

PERFIL VARIOPINTO. El abanico de usuarios "es muy diverso" y comprende desde "personas que siguen en activo con hijos a su cargo a mayores con menos autonomía" y se acercan a los cien años. Por eso la carta de actividades es tan amplia. "Ya que vamos a vivir más, que la vida sea plena", concluye Couceiro.