Sin tiempo para la resaca electoral. Los partidos se rearman ya para una nueva batalla: la de las municipales del 26 de mayo. Y todo ello después del tsunami del domingo, que convirtió al PSOE en la formación más votada en la ciudad de Pontevedra, un hecho que solo se ha dado una vez más desde la restauración de la democracia: en 2004, con José Luis Rodríguez Zapatero. Entonces, los socialistas obtuvieron el mayor número de votos de su historia en la capital provincial.
"A sociedade díxolle basta á corrupción e á desigualdade. Sopran ventos de cambio", dijo este lunes el candidato a la Alcaldía del PSOE, Tino Fernández, a través de un comunicado de prensa. "O vindeiro 26M, as pontevedresas e pontevedreses continuaremos a celebrar esta primavera de ilusión, optimismo, ledicia e socialismo e encheremos as urnas de puños e de rosas", añadió.
Fernández quiere aprovechar el tirón de Pedro Sánchez para mejorar los tres ediles que su grupo tiene en la Corporación. "Pontevedra viviu os seus anos dourados cando o PSOE estaba no Goberno. E iso é algo que incluso Lores admite", señaló.
Para el BNG de Miguel Anxo Fernández Lores, la noche del 28A tuvo tantas rosas como espinas. El regidor nacionalista, que aspira a repetir como alcalde por sexta vez consecutiva, pasa página tras la decepción de las generales. El objetivo de convertir a su teniente de alcalde, Carme da Silva, en diputada por Madrid cayó en saco roto. No dieron las cuentas a nivel provincial. En la ciudad el Bloque mantuvo el quinto puesto que ha ocupado ya en los comicios a las Cortes Generales de 2015 y 2016, aunque mejorando resultados.
"Eramos conscientes de que conseguir deputados era moi difícil. Pero estamos en remontada", afirmó Da Silva al recordar que su partido duplicó votos respecto a las últimas generales.
La misma lectura la hizo Lores que, en un comunicado de prensa, aseguró que la nacionalista es "unha forza á alza, estable e que ofrece garantías ós veciños". También recordó que "a candidatura de Pontevedra traballa dende xa nas vindeiras eleccións municipais co obxectivo de acadar os mellores resultados posibles".
El Bloque aspira a su primera mayoría absoluta. En 2015 se quedó a un concejal de conseguirlo. Pero en el partido creen que la fragmentación de la derecha en las generales, que podría reproducirse el 26 de mayo con PP, Vox y Ciudadanos, podría jugar a su favor para alcanzar los 13 ediles.
LOS VOTOS. Precisamente la fuga de votos a la formación de ultraderecha marcó el mensaje que este lunes dio el alcaldable del PP en rueda de prensa. Rafa Domínguez teme que esta división beneficie a su contrincante en las urnas. "Votar a Vox en las locales es votar a Lores", advirtió tras asegurar, como hizo su antecesor, Jacobo Moreira, que el 26M solo va a haber dos opciones: "La elección va a ser entre Lores y yo".
El candidato popular reivindicó a su formación como "un partido moderado" tras asegurar que el debate sobre la dimisión de Pablo Casado "no está encima de la mesa". El PP cosechó el peor resultado en unas generales desde su fundación en 1989. Aquel año obtuvo 11.961 papeletas en Pontevedra capital, frente a las 11.817 del domingo pasado. Los populares también perdieron 5.657 votos respecto a las anteriores generales, las de 2016, cuando Mariano Rajoy mandaba a nivel nacional y Moreira a nivel local.
Domínguez, que felicitó públicamente a Sánchez por su victoria, aseguró que las generales "no han ido de elegir Ence sí o Ence no". Y todo ello a pesar de que el PP respaldó la campaña de movilizaciones de la plantilla de la pastera. "Hoy está muchísimo más cerca el cierre de la empresa", advirtió el alcaldable popular, que confirmó que mantendrá su estrategia electoral para el 26M en lo que respecta a los ataques al BNG de Lores con su pacto con Bildu para las europeas. "No vamos a modificar nada de lo hecho hasta ahora", subrayó.
Por su parte, el alcaldable de Marea, Luís Rei, confía en que el batacazo de la formación que apoyó el 28A (En Marea) no se produzca en las municipales. "Ata o 26 de maio hai todo un mundo. Confiamos en que a traxectoria, o equipo e a campaña nos sirvan para impulsar a remuda no Concello", afirmó.
Por último, la candidata número dos de Ciudadanos a la Alcaldía, María Rey, afirma que la "marea naranja se extiende" tanto en Galicia como en Pontevedra, donde logró batir su techo electoral en unas generales con 6.348 votos el 28A. "Espero que el trabajo realizado estos años nos permita crecer en nuestra ciudad y devolverle la luz que está perdiendo", recalcó.
