Pontevedra se rinde a la Navidad

Las principales plazas y calles de la ciudad se llenaron en el inicio del primer fin de semana con luces y programación navideña
Los pontevedreses disfrutan del ambiente navideño. GONZALO GARCÍA
photo_camera Los pontevedreses disfrutan del ambiente navideño. GONZALO GARCÍA

Ahora sí, la cuenta atrás para la Navidad ha comenzado y se nota en el ambiente. A menos de una semana para el inicio de las grandes citas navideñas, con la programación diseñada por el Concello para estas fiestas ya en marcha y las luces, por fin, iluminando las calles y plazas de la Boa Vila, la ciudad era ayer un hervidero.

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La inminente llegada de Papá Noel, que, a la hora de regalar, sigue ganando adeptos, se hizo notar en las principales arterias comerciales. Benito Corbal, la milla de oro del comercio pontevedrés, fue durante toda el día un ir y venir de gente cargada con bolsas y paquetes.

Pero en una jornada en la que la lluvia dio una tregua, pontevedreses y visitantes no solo tomaron las calles para comprar, sino también para disfrutar, móvil en mano en modo cámara, del primer fin de semana con alumbrado navideño y de la oferta de ocio que arrancó el viernes.

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Uno de los puntos neurálgicos fue la Praza de España. Allí, estrenando localización, se celebra la vigésima edición de Pontenadal, la feria de artesanía en la que este año participan una treintena de negocios.

Muy cerca, en la Alameda, se sitúa Ponte Xogos, una Aldea de Nadal con cuatro carpas con distintos ambientes según la edad (Folerpa para niños de 0 a 2 años; Vagalume, de 3 a 6 años; Lóstrego, de 7 a 12; y Efémera, abierta a todos los públicos) que ayer hizo las delicias de los más pequeños.

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Muchos también se encaminaron al Recinto Feiral, donde se emplaza Nadal Xogos, un espacio que cuenta con un tobogán de hielo gigante, hinchables y karts eléctricos, además de talleres, una churrería, zona baby y zona juvenil.

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