La huelga del transporte y los efectos colaterales de la guerra iniciada por Rusia al Este de Europa han pasado factura al mercado laboral. Por primera vez en los últimos cinco años, Pontevedra cerró el mes de marzo con un repunte del paro, pasando de los 5.094 desempleados que se contabilizaban en febrero a los 5.127.
El crecimiento representa una subida intermensual del 0,26% que, de hecho, es la tercera más abultada entre las grandes urbes gallegas. Solo le superan Lugo (+2,2%) y Vigo (+1,1%), mientras el resto de ciudades de la comunidad registraron caídas en sus listas de demandantes de trabajo.
En comparación a ayuntamientos próximos, Pontevedra tampoco sale bien parada, ya que es una de las pocas excepciones en las que se ha destruido empleo. En la zona solo el acompañan Ponte Caldelas (+7) y Marín (+17), mientras que otros concellos como Cerdedo-Cotobade o Sanxenxo registraron un descenso del desempleo considerable, del 16% y 9,90% respectivamente.
PERFIL DEL DEMANDANTE. El 58,4% de las personas desocupadas en el municipio pontevedrés son mujeres y el 41,5% hombres. Por edades, la gran mayoría (el 96%) tienen más de 25 años y un 7,6% ni siquiera ha tenido la oportunidad de iniciar su vida laboral.
Por sectores, se repite la tónica de balances previos. El 74% de los demandantes pertenecen al sector servicios (donde precisamente ha subido más el desempleo en el último mes), el 8,3% a la industria, el 7% a la construcción y el 2,3% a la agricultura y pesca.
Como contrapartida, la lectura de los datos también arroja síntomas positivos. El crecimiento del paro en marzo no es un fenómeno del todo inhabitual, ya que tiene sucedido en ejercicios previos (la última vez en 2017). Y además, en comparación a lo que ocurría hace un año, Pontevedra ha reducido la lista de desocupados un 13%. En marzo de 2021 había en el concello 5.807 personas buscando trabajo, 680 más que en el último recuento.
A nivel contrataciones, la provincia registró la firma de 26.257 contratos, un 2,56% más que el mes anterior y un 3% más que hace un año. El repunte fue visible en todos los sectores salvo la industria, donde el cómputo se quedó por debajo de los 5.000 contratos. En cuanto a afiliaciones a la Seguridad Social, el IGE (Instituto Galego de Estatística) informó este lunes de que Pontevedra fue la única provincia gallega que redujo su masa de cotizantes en febrero, situándose ese mes en los 357.917 afiliados, 308 menos de los que constaban en enero.
