Víctor González: "Nos sigue alumnado desde África, Asia, América y Oriente Medio"

En su 50 aniversario, la universidad de Monte Porreiro es un faro de formación para todo el planeta. Imparte 30 grados, másteres, idiomas y también el 80% de la formación en extensión universitaria de la institución en toda España. "La Uned ya nació mirando al futuro", apunta el director del Centro Asociado a la Uned en Pontevedra
Víctor González, en el centro asociado a la Uned en Monte Porreiro. DAVID FREIRE
photo_camera Víctor González, en el centro asociado a la Uned en Monte Porreiro. DAVID FREIRE

Con medio siglo a sus espaldas, el Centro Asociado de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned) en Pontevedra, situado en Monte Porreiro, es la institución galardonada en esta edición de los Premios Pontevedreses, que otorga Diario de Pontevedra, en materia de educacion e investigación. Lo recibirá el próximo 6 de junio en el Auditorio de Afundación. Su director, desde 2020, es Víctor González Sánchez, que también está al frente de todo el Campus Noroeste de la Uned, que engloba a los centros de Galicia, Asturias, Castilla y León y Extremadura.

¿Qué significa para la Uned este premio Pontevedreses?
Sentimos orgullo y reconocimiento por que nos lo hayan concedido, especialmente en Pontevedra, porque es la ciudad en la que llevamos 50 años y probablemente fue el primer centro en crearse en España, pues ya estaba utilizándose desde 1972. Y, por otra parte, con satisfacción de que se reconozca todo lo que se ha hecho en todos estos años, por toda la gente que trabaja y ha trabajado aquí y todos los miles de alumnos que han pasado por aquí y lo que hemos contribuido en la provincia.

¿Es el de Pontevedra el centro más potente de España en actividades de extensión universitaria?
Así es. Nuestra función principal es la formación reglada, las enseñanzas de grado y posgrado, que aquí impartimos 30 grados y másteres, pero en nuestros estatutos también tenemos la encomienda de contribuir a la dinamización cultural y a la formación del entorno. Es lo que llamamos extensión universitaria, más pegada a lo concreto. El 80% de lo que se hace en extensión universitaria en toda España se hace desde aquí. Nos sentimos muy orgullosos porque dinamizamos nuestro entorno provincial, autonómico, el conjunto de España y llegamos a Europa, América e incluso Asia. Hacemos cursos vinculados con el Camino de Santiago y nos siguen desde el resto de Europa y desde sitios increíbles, desde el norte de África a Oriente Medio o la comunidad sefardí. Rondamos las 300 actividades anuales.

Cursos, conferencias... ¿Cuál de estas actividades destacaría?
Estamos especialmente contentos por haber puesto nuestro granito con un curso práctico de español que hicimos para acoger a los refugiados que venían de Ucrania. Se nos fue de las manos, porque luego contactamos con instituciones autonómicas, lo extendimos a Galicia, después al Campus Noroeste e incluso se matriculó gente desde Kiev. Sigue abierto [está grabado] y casi llegamos a los 5.000 estudiantes.

¿Cuántos alumnos tienen?
En enseñanzas regladas alrededor de los 4.500. Y en no regladas 25.000 o 30.000.

¿De todo el mundo?
Sí, sí. No es una exageración. Nos siguen de muchos países de América Latina y de todas las partes de España, pero también de China o Japón. En directo o en streaming.

¿Cuántos docentes son?
Unos 160 profesores-tutores. La sede central de la Uned está en Madrid y en casi todas las provincias hay un centro asociado, que también pueden tener aulas [en este caso Portas, Vigo, Porriño, Tui y Lalín], pero me gusta decir que todos somos Pontevedra.

Se dice siempre que la Uned no tiene un perfil de alumnado. ¿Han notado algún cambio al respecto en los últimos años?
Hemos notado incluso más diversidad. No tenemos un perfil homogéneo. Cuando nació la Uned, en los 70, se vinculaba mucho a la gente que estudiaba y trabajaba, que no había podido estudiar antes, que quería mejorar en su carrera laboral... Ese perfil sigue existiendo, pero también hay gente que estudia por el mero placer de aprender. El aprendizaje a lo largo de la vida es una función principal de la Uned, pero también es cierto que cada vez hay más gente joven que escoge la Uned como primera opción, porque le permite organizarse con su metodología semipresencial y a distancia. Gente menor de 30 años ahora mismo puede ser un tercio del estudiantado. El perfil es absolutamente variado.

También habrá pasado a la historia el cliché de universidad fácil o de última instancia.
No sé de donde sale ese cliché, porque no es cierto. Quizá ese concepto de última instancia es por quien no pudo estudiar en su día y lo hace ahora en la Uned. Yo lo llamaría de primera, segunda y tercera oportunidad. ¿Fácil? Quien conoce la Uned lo sabe. Los títulos son absolutamente prestigiosos y valiosos y quien conoce estudiantes de la Uned valora el título que tienen y la formación adquirida. Que sea una enseñanza semipresencial y en algunos casos online no significa que seamos una academia. Somos una universidad evaluada por la Aneca. Que pregunten a un estudiante de la Uned si le han regalado el título.

¿Quizás, al contrario, exijan más esfuerzo?
Los alumnos de la Uned tienen muchísimo mérito porque tienen disciplina, dedicación, rigor, trabajo y una serie de valores que les prepara para el mercado laboral. Aprovechan mejor el tiempo.

El centro asociado pontevedrés cumple 50 años. Hay que mirar al futuro. ¿Qué proyectos maneja?
Yo creo que la Uned ya nació mirando al futuro, porque continuamente se ha ido adaptando a los tiempos y a las necesidades. En un primer momento utilizaba medios de comunicación como el correo postal o el teléfono fijo. Después la radio y la televisión han sido elementos para lanzar mensajes a los estudiantes. Las nuevas tecnologías como Internet y el correo electrónico se han aprovechado y estamos continuamente en esa innovación. Lamentablemente la pandemia nos puso a prueba y yo me atrevería a decir, con toda modestia, que respondimos muy bien. De hecho apoyamos a varias instituciones públicas. Nosotros pasamos de cerrar los centros el viernes 13 de marzo a continuar con las clases el lunes siguiente. No podíamos parar. No estábamos preparados al cien por cien, nadie lo estaba, pero respondimos de una manera estupenda. De cara al futuro queremos consolidar las aulas que tenemos y modernizar nuestras instalaciones. Nos hemos modernizado tecnológicamente y queremos ser más dinámicos y darle una vuelta física interior y exterior a nuestro centro para prepararnos para el futuro. Por ejemplo, no todo el mundo sabe que en este centro hay laboratorios de física, de química, de biología... Que se pueden hacer carreras técnicas aquí en Pontevedra. También hay laboratorios de psicología, ingeniería, informática, matemáticas... Se pueden estudiar 30 grados y creciendo. Este año hemos puesto en marcha el de Educación Infantil y el de Ingeniería de la Energía, que está muy de moda.

¿Qué valoración hace de estos grados en su primer curso?
Pues muy buena. El de Educación Infantil ha tenido tanto éxito de alumnos como de profesores-tutores nuevos. Contamos con docentes en ejercicio, gente que explica de primera mano lo que se hace en los colegios, y en el de Ingeniería de la Energía la acogida ha sido buena.

¿Habrá algún grado nuevo de cara al próximo curso?
Ahora mismo en la provincia de Pontevedra se ofrecen todos los grados posibles. Un alumno puede estudiar aquí todo lo que ofrece la Uned. Si la Uned pone a disposición de la comunidad universitaria cualquier otro grado, el compromiso siempre va a ser ofrecerlo. Pero a día de hoy no me consta nada nuevo, quizás sí en un par de cursos.

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