Absuelven a un vigués acusado de abusar de su hija de cinco años

El tribunal no pudo valorar el testimonio de la menor y cree que sus respuestas pudieron ser "sugeridas"

 

 

Sección quinta de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo. ADP
photo_camera Sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ubicada en Vigo. ADP

Un hombre acusado de abusar sexualmente de su hija de cinco años y que fue juzgado por la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha sido absuelto del delito debido a la falta de pruebas en su contra, al ser imposible valorar el testimonio de la víctima, y por las contradicciones apreciadas por el tribunal en otras pruebas.

Según se recoge en la sentencia, al ser menor de edad la niña no se pidió su testimonio en el juicio, sino que se recurrió a un testimonio previo grabado. No obstante, dicho testimonio no se pudo analizar por la sala debido a problemas técnicos en la grabación (pitidos, sonido muy bajo, etc.), que la hacían ininteligible.

Además, el tribunal ha apuntado que los informes psicológicos del Imelga quedaron desvirtuados por otras pruebas periciales, que pusieron en evidencia que las manifestaciones de la niña al respecto de lo que supuestamente le había pasado (que su padre le había introducido un dedo en la vagina) fueron muy parcas y no quedaba claro que hubieran sido espontáneas.

Del mismo modo, ha incidido en que las manifestaciones de sus hermanas, que también fueron examinadas, resultaron igualmente parcas y contradictorias.

"RESPUESTAS SUGERIDAS". Los magistrados señalan que se aportó a la causa una grabación hecha por la madre de la niña, en la que la menor afirma que, lo que en realidad le ocurrió, es que le había "picado un bicho" en los genitales. Tras esa afirmación, al tribunal le resulta "llamativo" que "se pierde la espontaneidad" en las palabras de la niña, y se escuchan silencios y susurros "compatibles" con "respuestas sugeridas".

Asimismo, el tribunal también apunta que la denuncia fue interpuesta por una amiga de la madre, que es abogada, y que hay una conversación de WhatsApp entre la denunciante y ella, en la que la madre le pide "que no haga nada" porque "las niñas cambiaron de versión".

Por otra parte, en la sentencia también se señala que el eritema que presentaba la niña en la vagina, diagnosticado por su pediatra como una vulvitis, "no es compatible con un cuadro agresivo", según señaló en el juicio un médico forense.

Así, la Audiencia ha resuelto absolver al acusado que, en todo momento, "ha negado tajantemente los hechos", y ha recordado que en una causa por supuestos abusos sexuales, el testimonio de la víctima es una prueba fundamental. En este caso, no ha podido ser valorado.