Opinión

Desmadre en la televisión pública

COMO OTRAS muchas empresas públicas, Radio Televisión Española tiene muy difícil arreglo. Dicen que está obsoleta y mal gestionada. Un come cuartos del erario. Sirve, eso sí, para que algunos directivos vivan a cuerpo de rey. Llegó Rosa María Mateo para cubrir una provisionalidad y ahí sigue, mientras el ente continúa empeorando. O eso parece. Engloba en los puestos llamados de alta dirección a siete personas, cuya suma de sueldos anuales (publicados por la prensa) asciende a 1.125.650 euros, cuantía a la que hay que añadir los 10.405,02 euros brutos mensuales que cobra la administradora única, la señora Mateo. Así se entiende la regeneración democrática planeada para aniquilar el facherío. Según las cifras dadas a conocer, el sueldo más bajo de los referidos dirigentes es de 139.537,31 euros anuales, y los máximos de 176.121,80. El sueldo del presidente del Gobierno, por comparar, ronda los 83.000 euros. Y aún quedan fuera los llamados directivos de segundo nivel. El dinero público da para todo. El desembolso será muy rentable para financiar un instrumento de propaganda, pero para quienes lo pagamos, es un insulto que un país que no tiene para pan (sanidad, carreteras...) lo gaste en estampitas.

Comentarios