Piden 9 años de cárcel para un acusado de introducir 22 kilos de cocaína en el puerto de Marín

La droga partió, camuflada en un contenedor, del puerto de Cartagena (Colombia) el 22 de julio de 2018
Vista aérea del Puerto de Marín. ADP
photo_camera Vista aérea del Puerto de Marín. ADP

La Fiscalía pide 9 años de prisión para M.M.V., acusado de introducir 22 kilos de cocaína en España a través del puerto de Marín, a donde la droga llegó camuflada en un contenedor procedente de Colombia. 

El acusado será juzgado este martes en la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra y el ministerio público también pide que se le imponga el pago de una multa por valor de 900.000 euros. 

Según el escrito de acusación pública, M.M.V. constituyó la sociedad 'Negocios M.L.', de la que era administrador único, y a través de la cual gestionó la adquisición de una partida de cocaína en Colombia. 

La droga partió, camuflada en un contenedor, del puerto de Cartagena (Colombia) el 22 de julio de 2018 y llegó al puerto de Marín el 8 de agosto. 

El acusado no se presentó en el puerto a la llegada del contenedor, tal y como había anunciado, sino que lo hizo después

Inicialmente, el acusado había contactado con una empresa de despacho de aduanas para la recepción y transporte del contenedor pero, días antes de la llegada a puerto, desistió del servicio y anunció que él mismo se haría cargo del contenedor a su llegada a Marín. 

Cuando el contenedor ya estaba en la terminal gallega, la Guardia Civil y Aduanas procedieron a su inspección, y encontraron, en el interior de los marcos de ambas puertas, 36 paquetes, con un total de unos 22 kilos de cocaína (que alcanzaría un valor de más de 800.000 euros en el mercado ilícito). 

El acusado no se presentó en el puerto a la llegada del contenedor, tal y como había anunciado, sino que lo hizo después, cuando supo que éste había sido abierto e inspeccionado. 

Por estos hechos, la Fiscalía atribuye a M.M.V. un delito de tráfico de drogas y pide que se le condene a 9 años de prisión y al pago de una multa de 900.000 euros