Las fiestas de este atípico verano continúan en Pontevedra y comienzan en Vilagarcía y de ahí la licencia del tiular. De fiesta con los 'kikos' y me explico...
Esta noche (21,30 horas) nuestro Kiko da Silva (banda deseñada) compartirá escenario en los jardines de María Victoria Moreno con Quico Cadaval para poner el broche de oro al programa 'Xeiras das Artes'.
El otro Kiko es Kiko Veneno que ofrecerá un concierto mañana sábado en Vilagarcía, pero que nadie se vuelva loca, porque en aplicación del protocolo anti-covid-19 el aforo se limitó a 500 personas y según comunica el Concello de Vilagarcía ya está completo.
En Vilagarcía las fiestas en honor a San Roque comezarán hoy, a las 20.30 horas, con la lectura del pregón desde el balcón de la Casa Consistorial que este año correrá a cargo de la enfemera del Hospital del Salnés Ana Romero y del celador del ambulatorio Luis Portas, como representantes de un colectivo que estuvo en la primera línea de combate contra la pandemia del coronavirus al que el Concello quiere homenajear con este acto y con la concesión de una placa de reconocimiento a su trabajo.
Tal y como ya anunció hace unas semanas el Concello arousano este año no se celebrará la tradicional Festa da Auga.
Además, del ya citado Kiko Veneno por Vilagarcía pasarán Guadi Galego, Brisa Fenoy y Susana Seivane.
Pero volviendo a Pontevedra quiero felicitar a Carme da Silva por el programa de las fiestas de A Peregrina que llegan a su fin el domingo. A ella y a todo su equipo.
Las fiestas de A Peregrina se despiden con numerosas actividades, pero por lo que a los conciertos se refiere dejar constancia que por los escenarios de A Ferrería, Praza de España y Campolongo pasarán 'La casa de los ingleses', Pelepau, Emilio Rúa, Moloch, Daniel Minimalia, Pablo Lesuit, Os Garuchos, Rosa Cedrón Dúo y 'The Lakazáns'.
Cambiando de tercio, que diría mi compañero Santi Mosteiro, si este año hubiese habido feria taurina. Dejar constancia de que la hija de Rocío Jurado y Ortega Cano, Gloria Camila se pasó jueves por Bueu, donde como ya les conté en estas mismas páginas estuvo también el conde Lecquio, pero comiendo en Beluso.
Y claro, a una le entra la 'morriña' y echa de menos aquellos veranos en los que nos citaban en Bueu para entrevistar a Javier Solana que se refugiaba en la localidad para descansar de sus quehaceres profesionales aunque siempre pendiente del teléfono. ¡Qué tiempos aquellos!.
