Opinión

"Mi Lores" recibe a su cuarta nieta, Xela

Lucía Bárcena mira a su madre, Pilar, que llevó un vestido lila de Coosy a la boda del año. PATRI FIGUEIRAS
photo_camera Lucía Bárcena mira a su madre, Pilar, que llevó un vestido lila de Coosy a la boda del año. PATRI FIGUEIRAS

XELA ya está aquí. La cuarta nieta del alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, nació ayer para colmar de felicidad a toda su familia, a sus padres, a su hermanita Lía, y a sus orgullosísimos abuelos. La pequeña llegó al mundo en un parto natural y tanto ella como la madre se recuperan perfectamente. Es la cuarta nieta de ‘mi Lores’, tras Xulia y Maia, y de la propia Lía, de dos años. Todas chicas, efectivamente. Quiso la casualidad que viera la luz el Día de Galicia, así que su fecha de cumpleaños será ya de doble celebración. Yo solo puedo decir que muchísimas felicidades a toda la familia y que me encanta el nombre. Xela. Ideal.

Y para ideal la boda celebrada el sábado en el Pazo de Oca, en A Estrada, tal como les contaba ayer. Dicen que es el enlace del año en Galicia, el de la influencer Lucía Bárcena y el empresario y aristócrata Marco Juncadella Hohenlohe (de los Hohenlohe de toda la vida), en la que no faltaron ni José Bono jr. ni Jaime de Marichalar, uno de los pocos con mascarilla, pues al parecer se le hizo una PCR a todos los invitados cada día desde que comenzaron los fastos.

Lo que no sabíamos el sábado es que el enlace, que podemos decir que fue retransmitido en Instagram por la corte de amigas influencer de los contrayentes, tuvo un toque pontevedrés. Y es que la madre de la novia, Pilar, lució un precioso vestido lila, con falda tableada, de Coosy, la firma pontevedresa fundada por Virginia Pozo que no puede faltar en ningún evento de este nivel.

No habíamos visto tampoco el segundo vestido de novia para disfrutar en la tremenda fiesta con música que se organizó tras el banquete, servido por Pepe Solla, en el que brilló el marisco por su (casi) ausencia, aunque no faltaron el pulpo, el tomate confitado con queso y albahaca, el foie casero, tempura de verduras de la huerta, setas de temporada con huevos y trufa, la vieira asada con sopa de curry rojo o el jamón de bellota. El plato principal fue lomo de merluza de Celeiro (casi nada) con crema de patata. Y de postre baumkuchen con chocolate fundido, traído desde Madrid.