Opinión

Ritmo en la despedida de las fiestas

Las corales pontevedresas actuaron seguidas de Lola Índigo, que llegó a la tierra meiga con el Akelarre Tour
concerto de corais na praza da ferreria festas da peregrina
photo_camera concerto de corais na praza da ferreria festas da peregrina

SE TERMINAN las Festas da Peregrina y todo el mundo está pensando ya en el próximo evento festivo. El verano es lo que tiene, no deja a una descansar. Este domingo se aprovecharon los últimos pasacalles y las actuaciones de las corales de Pontevedra.

Los encargados de amenizar el ambiente a mediodía fueron Os Zoqueiros do Porriño, Mil9 y Os Fervellos do Pío, que llenaron de alboroto las calles. Al escenario se subieron el domingo por la noche las corales: Alameda do Fogar do Maior, Bella Helenes, Voces Amigas de Mourente, Coral Helénica, Coral Polifónica de A.C do Chopo, Airiños de Campañó y la Coral Polifónica de Salcedo. El concierto estuvo muy animado, convirtiendo la Praza da Ferrería en un hervidero de gente que tampoco quería despedirse de las fiestas. A más de uno ya se le veía la lagrimilla nostálgica, para qué engañarnos.

Ninguna coral se quedó atrás. El repertorio pasó por canciones populares, que una servidora se animó a cantar, hasta fragmentos de zarzuelas. En estas últimas ya no andaba tan afinada y esperé al concierto de Lola Índigo para cantar los nuevos temas de su tour Akelarre, que llegó por fin a las tierras meigas gallegas por todo lo alto. La actuación estuvo cargada de ritmo e invitó al público a bailar como nunca.

La celebración continuó con la habitual verbena en Montero Ríos, que a mí me encanta. Los fuegos de artificio en As Corvaceiras iluminaron el cielo pontevedrés y fueron el colofón perfecto para unas fiestas inmejorables.

PROMESAS INFINITAS. Ultimamente Pontevedra está abarrotada de gente. Si no que se lo digan al concelleiro Iván Puentes, que en la noche del concierto de Beret, como un fan más, hizo una cola kilométrica en un puesto de pizzas de A Ferrería. Todo este sacrificio fue por cumplir una promesa con sus hijos. Si es que los padres valen oro. Esperemos al menos que la espera interminable mereciese la pena, que la cena fuese de provecho y, lo más importante, que sus niños acabasen contentos.

Por último, recordar que este lunes la psicóloga del CIM, Rosa, está de cumpleaños. ¡Felicidades!

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