Vaya por delante que aquello de mezclar a niños con políticos no es santo de mi devoción, pero lo cierto es que ayer se vivió en A Estrada una de esas estampas que no resultan para nada chirriantes.
La nueva conselleira de Educación, Carmen Pomar, visitó el CEIP Plurilingüe de Oca y aprovechó para destacar el papel de los colegios rurales, tal como les cuenta, muy bien, además, mi compañera Blanca Paz unas páginas más adelante.
En esta visita Carmen estuvo acompañada del alcalde anfitrión, José López. Y si Telmo Martín es el de los ojos más bonitos de la ría, puedo decir que José es el de la mirada más bonita del interior de la provincia, porque menudos ojazos y menudo porte tiene este caballero.
A lo que iba. Que López estuvo la mar de dicharachero con los niños. Bromeó con ellos e incluso vaciló a alguno que llevaba material escolar y vestimenta del Real Madrid. "Moito madridista vexo por aquí...". Pues sí, José, ya ves. Niños que sienten los colores a pesar de que el equipo no viva sus mejores momentos, precisamente. También le preguntó a alquno de los de Infantil donde vivían y recibió como respuesta "Na miña casa". Pues claro que sí. La conselleira también se animó a hablar con los niños, pero de momento no se la ve tan dicharachera como su antecesor, Román Rodríguez, que siempre aprovechaba estos momentos para recordar alguna anécdota de su paso por las aulas (de escolar, no de profesor).
BUEN PALADAR. Les confieso también que me morí un poquito de envidia al ver lo bien que se lo pasó la expedición que ayer llevó el Salón do Libro a la librería Lello, en Oporto. La concelleira Carmen Fouces, la actriz Andrea Bayer, la escritora Eva Mejuto, varios compañeros periodistas y, como no, nuestro querido Orbil, triunfaron al otro lado de la raia. Si estar en la famosa librería es toda una gozada, no les cuento lo bien (y barato) que comieron en las Galerías de París, un local con un encanto tremendísimo que pienso conocer en cuanto pueda hacer una escapadita al país vecino. Entre eso y las compras de libros, ya no quiero seguir escuchando. En la presentación triunfaron los cuentos de Andrea, Orbil haciéndose selfis con todo el mundo y las rosquillas y galletas con las que los pontevedreses agasajaron a portugueses y visitantes. Una delicia.
Como deliciosas están también las salchichas y las cervezas del Outubrofest que ocupa estos días en la Praza do Teucro. Allí pudimos ver al concejal de Mobilidade, Demetrio Gómez, pero no degustando una pinta, sino sirviéndolas tras la barra. ¡Olé!
