Opinión

De la Vega y sus raíces gallegas

De la Vega, con Lores, Carmela Silva y el rector de la Uned, este martes en Pontevedra. DAVID FREIRE
photo_camera De la Vega, con Lores, Carmela Silva y el rector de la Uned, este martes en Pontevedra. DAVID FREIRE

LEVANTÓ EXPECTACIÓN la visita a Pontevedra de María Teresa Fernández de la Vega. La presidenta del Consejo de Estado y ex vicepresidenta del Gobierno de Zapatero inauguró en la Uned el Aula Magna ‘Mujeres por África’ y les aseguro que fue de lo más comentado en la ciudad. Llegó en taxi, por cierto, y nada más tomar la palabra presumió de raíces gallegas al recordar que una hermana de su padre vive en Vilagarcía. Ella, que a su entrada fue recibida por el rector de la Universidad a Distancia, Ricardo Mairal, saludó efusiva a la presidenta de la Deputación, compañera de partido y de confidencias en la etapa de Carmela Silva en la Mesa del Parlamento. miLores estaba en la comitiva de recepción. La ex portavoz del Gobierno alucinó con los jardines de la Universidad a Distancia (¿y quién no?) y también con las instalaciones de la Uned. Dentro le esperaban concejales socialistas y también alguno que otro del PP, como Pepa Pardo, que no quiso perderse el acto, pero a quien un ataque de tos le jugó una mala pasada que la hizo abandonar la sala de conferencias para ‘desatascarse’ en los pasillos.

De la Vega, amable con todos los que le salieron al paso, recordó su etapa como profesora en la UNED, donde dice que disfrutó más que la niña de Rajoy en la tienda de las chuches. Me da a mí después de verla ayer que su paso por la política la dejó aún más complacida.

Quien no sale últimamente de Galicia es Alberto Chicote, el chef que conduce el ¿Te lo vas a comer? en la Sexta. En el penúltimo programa se metió con las conservas que hacen trampas. Y aunque insistió varias veces para hablar con alguien en Anfaco, la patronal española conservera, que está en Vigo y cuya cabeza visible es, además, el actual presidente de la CEG, Juan Vieites, el popular cocinero se quedó con las ganas de que alguien le contestase... y bramó contra Anfaco.

Quien no le dio calabazas a Chicote fue mi querido Pepe Solla. Esta vez el programa hurgaba en el fraude en las empanadas caseras. Y nadie mejor que Solla para hacerle la prueba del algodón a las fake-empanadas. Por algo es el chef elegido por Repsol para repostar sus estaciones de servicio con el rico manjar gallego.

Por cierto, que si hablo de manjares, debo rendirme una vez más ante mi admirado Ramón Rozas. Ayer cumplió 50 soles, aunque viéndolo pareciesen apenas 30, y llenó la redacción de viandas varias de las que dimos buena cuenta a lo largo de la tarde. Detallazo (otro más) de Rozas en tan señalado día. ¡Que cunda el ejemplo!

Y mi felicitación también para otra compañera periodista, Mónica Valderrama. La vicerrectora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la UVigo, profe en Ciencias Sociais, despachó ayer sus 47 primeras primaveras. ¡Qué sean muchas más y las sigas llevando tan bien!

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