El Premio Limón, que cada año conceden los periodistas de Pontevedra en una votación que efectúan durante su cena anual, ha vuelto a salir este viernes a la palestra en la Deputación. La presidenta provincial, Carmela Silva, se refirió a este galardón tras una rueda de prensa que no resultó excesivamente larga, muy diferente a comparecencias por las que en años anteriores recibió el cariñoso galardón de los profesionales de los medios de comunicación.
Tras la edición de 2019, en la que consiguió el Premio Limón, había anunciado que seguiría peleando por revalidar el título y pidió personalmente a los periodistas que votasen por ella porque quería repetir en 2020 y al año siguiente y el siguiente. Yo ya le había dicho que ni yo ni nadie podíamos prometérselo porque siempre hay unos cuantos candidatos para llevarse el agasajo que, en esta última edición, fue a parar a las manos de un compañero suyo de partido, el alcalde socialista de Ponte Caldelas, Andrés Díaz.
Carmela Silva, que se ha tomado con buen humor el premio ‘amargo’ de la prensa, ha vuelto a repetir este viernes que se mostraba de cepcionada por no haber podido retener el título y ha ‘amenazado’ con volver a usar la estrategia que había utilizado en años anteriores. A partir de ahora habrá que volver a poner el cronómetro para ver si reúne los méritos necesarios. En fin, que seguro que no lo tendrá nada fácil porque seguro que habrá más aspirantes que opten al galardón (El Pontevedra CF y su presidenta quedaron en el segundo puesto, ahí dejo el dato).
Y de una cena nos vamos a un desayuno, en concreto al programa ‘Los Desayunos de TVE’. Xabi Fortes, el periodista pontevedrés que presenta este espacio matinal, está de aniversario. este viernes celebró su 54 aniversario con una cena familiar en la capital del Lérez, a la que regresa siempre que se lo permite su trabajo televisivo. ¡Muchas felicidades! Recibe un cariñoso tirón de orejas de tus colegas del Diario de Pontevedra.
Otro pontevedrés que está saliendo mucho en la pantalla de televisión es el actor y humorista (yo diría multifacético) David Amor. Estos días ha estado en Pontevedra, su ciudad natal (es de la lparroquia de Marcón), para ver a su familia y, de paso, llevar su coche al taller para una puesta a punto. Por cierto, que le he visto muy fino, como se dice en el argot deportivo.
En los últimos meses ha perdido algunos kilos con la práctica deportiva, en concreto con el ciclismo. Y es que, para atender todos sus compromisos profesionales, que le obligan a ir de aquí para allá, le viene muy bien haber perdido algo de lastre. ¡Un besazo, David!
