Opinión

Entre médicos y admiración

María Dolores Muñoz
photo_camera María Dolores Muñoz.

PARECE QUE la Madre Naturaleza nos quiere dar un respiro y por fin podemos disfrutar de un rayito de sol. Yo solo espero que no sea cosa de 24 horas y que pueda dejar el paraguas aparcado un ratito en casa y salir a tomar mi café de mañana a nuestras bien queridas terrazas pontevedresas. El buen tiempo sienta bien a todo el mundo y con el drama que estamos viviendo en estos momentos, qué mejor manera de relajarse que salir a tomar el aire.

Quienes sí aprovecharon bien el buen tiempo fue el Gobierno local de Marín. Ayer por la mañana se dejaron ver por el Lago de Castiñeiras para participar en una recogida de basura en el espacio natural. Sí, sí, la alcaldesa María Ramallo y los ediles Marián Sanmartín, Cristina Acuña y Manuel Santos, se pusieron manos a la obra junto al resto de voluntarios para dejar como nuevo el Parque. Si es que estos políticos no tienen miedo a mancharse las manos. Tampoco los pies porque os diré que sé de buena tinta que Sanmartín no es muy habitual en el mundo del calzado más allá del tacón y últimamente le está dando una oportunidad al estilo más ‘sport’. Os diré una cosa, le sienta fenomenal.

Pero lo que de verdad le sienta bien a las mujeres es el reconocimiento por su trabajo. Que se lo digan a la comandante médico María Dolores Muñoz. Destinada en la Brigada Galicia VII del Ejército de Tierra (la Brilat que tenemos aquí al ladito) que ha sido galardonada con el premio ‘Soldado Idoia Rodríguez’.

Un premio que la señala como un referente en el ámbito profesional y que reconoce su esmerada preparación y entrega en las Fuerzas Armadas. Al parecer, la comandante médico ha participado en varias misiones internacionales e incluso sufrió un atentado en Afganistán. Si eso no es una historia digna de contar... Yo me retiro de la vida. Mi más profunda admiración y enhorabuena.

Dejando a un lado la seriedad que se me ha puesto con este tema, hoy quiero contarles un cotilleo muy jugoso que me ha llegado recientemente. Al parecer, el exsubsecretario general de la ONU Joan Clos, que estuvo de visita ayer por nuestra querida Boa Vila, comparte con nuestro también querido alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, algo más que su amor por el urbanismo y las ciudades sostenibles. ¡Los dos son médicos! Pero ahí no acaba la cosa, al parecer Clos es epidemiólogo. Estoy segura de que más de uno, con la que está cayendo, ha aprovechado la ocasión para hacerle alguna que otra consulta. Y ya saben que cuando marzo mayea mayo marcea.

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