HOY ESTO va de felicitaciones y enhorabuenas, lectoras y lectores, así que no puedo estar más contenta. Se lo voy a demostrar brevemente escribiendo un ¡yupiii!, que me sale directamente del corazón. Porque es que, además, la primera de estas felicitaciones está dirigida al presidente autonómico más gentleman de todos los que hay ahora mismo en España, con más planta y estilazo, ese mismo por el que se mueren en Madrid unos y otros, porque tiene enamorados a progresistas y conservadores de toda índole y condición. Sí, hablo de nuestro presi, Alberto Núñez Feijóo, que está de cumpleaños. Me han dicho que cumple 59. Ni sus más férreos detractores pueden negarme que muy bien llevados. Tiene la misma edad que George Clooney. Ahí lo dejo. O que Hugh Grant. ¿Se acuerdan de este último en su papel de primer ministro británico en la película Love actually bailando en la residencia oficial de Downing Street? Me pregunto si nuestro querido presi, durante tanto tiempo soltero empedernido como el personaje de Grant, se permitió alguna vez ese capricho en Monte Pío. A mí me gusta pensar que sí, que se puso un disco de Siniestro Total (o de Pili Pampín, que tampoco todos somos Jacobo Moreira) y se dejó llevar por un rato. Sea como sea: ¡un millón de felicidades, presidente! Suerte, cabeza y valentía en estos tiempos tan complicados. Tus éxitos serán los de todos.
La otra enhorabuena que me muero por dar es a mi compañero Víctor Méndez, que acaba de publicar su segundo libro, Traficantes de muerte. De la heroína al fentanilo. Lo presentó ayer en la avenida de Santa María y todos en el periódico estamos seguros de que va a ser un título fundamental para todo aquel que quiera conocer a fondo el mundo del narcotráfico en España y en el mundo. Ya lo fue su primera obra, Narcogallegos. Tras los pasos de Sito Miñanco.
Víctor estuvo acompañado por el jefe de la Unidad Greco Galicia de la Policía Nacional, Emilio Rodríguez, y el gerente de la Fundación Galega contra o Narcotráfico, Fernando Alonso. Entre el público que asistió al acto estuvieron el director de Diario de Pontevedra, Miguel Ángel Rodríguez; el excomisario y vicepresidente de la Fundación Galega contra o Narcotráfico, Enrique León (que es, por cierto, la persona real que inspiró el personaje de Tristán Ulloa en la serie Fariña) y el juez Xosé Barreiro Prado, entre otros.
Me han chivado, por cierto, que Víctor comenzó su intervención con una cita de El principito, que es uno de mis libros favoritos. La usó referiéndose a estos tiempos de coronavirus donde los actos culturales están siendo tan castigados y tantos profesionales de este sector lo están pasando tan mal. "¡La vida no consiste en esperar a que pase la tormenta sino en aprender a bailar bajo la lluvia!". No puedo más que aplaudir la elección de la cita. ¡Toda la suerte del mundo con tu libro, Víctor!
