A veces nuestro propio subconsciente y nuestra lengua nos traicionan. Queremos decir una cosa y nos sale otra. Qué se le va a hacer. Uno de esos lapsus lo tuvo ayer el diputado provincial del PSOE Santos Héctor. El hombre estaba en el Pleno de la Deputación defendiendo una moción para apoyar una ILP sobre la lucha contra los incendios forestales y la necesidad de proteger el bosque autóctono. Pues no sé si el motivo de su confusión fue que eran las dos de la tarde y a esas horas el hambre ya empieza a apretar o si su traspiés lingüístico se debió a otra cosa. El caso es que, hablando de limitar la masa de eucaliptos en Galicia, el socialista dijo «industria pastelera» en vez de «industria pastera» y se quedó tan ancho. De hecho, creo que ni siquiera se dio cuenta de su lapsus. Tranquilo Santos, seguro que a esa hora los periodistas que estaban cubriendo el Pleno también estaban pensando más en tartas de crema y croissants que en debates políticos. Además, una confusión la tiene cualquiera. Yo hace ya tiempo me pasé varias semanas pensando que este diputado se llamaba Héctor Santos en vez de Santos Héctor. Con eso se lo digo todo.
Y hablando de políticos majos, el Concello de Poio convocó para el próximo lunes una rueda de prensa. El cotilleo es que la persona que va a comparecer es la concejala nacionalista de Cultura, Lidia Salgueiro, que se reincorpora tras su baja de maternidad. Desde aquí le mando muchos ánimos, porque dejar a los retoños en casa y volver al tajo siempre se hace duro y hace falta fuerza. A otro al que le mando mis mejores deseos y muchas felicidades es al atleta Víctor Riobó, que ayer estuvo de cumpleaños. Además, sé de buena tinta que Víctor es muy fan de mi sección. Pues que sepa que yo también soy muy fan de sus logros. A ver cuando nos vemos para echarnos piropos mutuamente.
