Opinión

El poder de las redes sociales

Los amantes del sol disfrutaron este lunes de sus últimos rayos en Silgar. SANTY MOSTEIRO
photo_camera Los amantes del sol disfrutaron este lunes de sus últimos rayos en Silgar. SANTY MOSTEIRO

LO QUE pueden las redes sociales no se lo imagina nadie. Y si no que se lo digan a Carmen Rodríguez, propietaria del Bar Andorra, en Santa Clara, que se hizo viral en Twitter por un hermoso gesto a un joven al que sirvió gratis un plato de comida. El caso es que media Pontevedra, y una buena parte de España, se volcó con la historia y aplaudieron la solidaridad de la dueña del local prometiendo visitas. Vamos, que si a Carmen le empieza a llegar el montón de gente que dijo que iría a su bar la pobre va a acabar agotada de tanto servir. Uno de los que se apuntó a ir a tomar algo al Bar Andorra fue Rafa Domínguez, que promete una reseña en el lugar para su conocido Rafadvisor, una especie de registro de los mejores platos que se pueden degustar en la hostelería pontevedresa.

La que estos días ha degustado mucho ha sido la concejala de Promoción Económica, Yoya Blanco, que a costa de organizar eventos gastronómicos dentro de la firma Pontevedra Capital Gastro se harta de probar las tapas, los pinchos y los postres de la hostelería. Tanto corre de un lado a otro que la pobre se torció un tobillo la semana pasada yendo de presentación en presentación y el percance la tuvo varios días en cama. Afortunadamente, este lunes volvió para presentar una nueva edición del certamen de escaparatismo que organiza el Concello. Lo hizo acompañada del diputado provincial Gregorio Agís, al que llamó Goyo. Yo, que no conozco mucho a Gregorio, tengo que decirles que jamás había escuchado que se refiriesen a él con ese nombre. Hasta ahora, en Pontevedra solo conocía a un Goyo, y no es otro que el concejal no adscrito y ex de Ciudadanos Goyo Revenga, aunque hace un tiempo que no sé mucho de él. Por cierto, tendrían que ver cómo se lo curra el jefe de prensa de los socialistas en Pontevedra, que tanto escribe una nota como coloca carteles para los actos. Este mismo lunes, cargó con el letrero que anunciaba el certamen de escaparatismo antes de la rueda de prensa.

No dejen que me despida sin las correspondientes felicitaciones. El lunes, nuestro compañero de fotografía José Luiz Oubiña tuvo el detalle de traernos a la redacción una caja de bombones que nos endulzó la tarde. Nos supo a gloria y, a cambio, le envío por aquí un beso muy cariñoso. Tengo que decirles que ni siquiera yo, con toda mi curiosidad, fui capaz de saber cuántos años cumplía nuestro compañero. Eso sí, lo que es una certeza que nadie puede negar es que está hecho un chaval. ¡Que cumplas muchos más, Oubi!

Además, el miembro de los Black Stones Tino Domínguez también sopló las velas hace unos días y me olvidé de felicitarlo. Como dicen que más vale tarde que nunca, desde aquí le envío un afectuoso saludo. Espero que lo haya celebrado por todo lo alto, como debe ser.

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