ESTABA EUFÓRICO y no era para menos. El debú del músico Xurxo Souto en las Visitas cruzadas al Museo fue todo un éxito, al igual que el de su compañera de experiencia, la cantautora Sés. Ambos estaban encantados. "Isto foi a felicidade, non o pasei tan ben desde o día da Primeira Comunión", comentó luego.
Y una vez más, lo que bien empieza bien acaba. El éxito posterior tuvo un ilusionante prólogo: las entradas se agotaron en menos de un minuto y mucho me temo que las del próximo domingo corran la misma suerte. Los artistas invitados serán Iria Pinheiro e David Cortizo, un cartel de lujo para repetir los que este domingo pudimos disfrutar con la visita y para probar los que no tuvieron la suerte de conseguir un hueco.
Los que no faltaron a la cita fueron los diputados Xosé Leal y Eva Vilaverde y la concelleira de Deportes de Poio, Marga Caldas, a los que vi muy entregados con la visita. También descubrí entre el numeroso público al presidente del Casino, Jaime Olmedo, y a su esposa y jefa territorial de Sanidade, Ángeles Feijóo Montenegro.
Pero si la experiencia cultural fue enriquecedora, tanto o más rico fue el pincho con el que nos obsequiaron después. Les voy a hacer la boca agua: empanada artesana, lacón estilo feira, crema de calabaza y manzana, tablas de quesos gallegos, cuchara de salpicón de pulpo, cuchara de mejillón en escabeche y taza de fabes galegas. Todo ello regado con vino y vermú. Delicioso, se lo puedo asegurar.
Antes de despedirme no puedo evitar recoger un comentario que colgó este fin de semana el alcalde popular Jorge Cubela en su Facebook: "Defendamos a lo nuestro y a los nuestros. Pero si alguien se tiene que ir a su casa, se debe ir. No estamos en política para defender lo indefendible. Cansado, estamos cansados". Todo un crack, un máster del Universo.
