LA MANIFESTACIÓN de tractores en Lugo llega dos meses después de las últimas movilizaciones del sector. Parece algo relevante que se produzca en plena campaña electoral y cuando otras organizaciones agrarias habían iniciado acciones de sensibilización. Hay, lamentablemente siempre, razones para que los ganaderos expresen su malestar. Hay también en el actual contexto datos para hablar de una evolución en positivo para los intereses de los productores. No puede decirse que las negociaciones que hubo entonces terminen en papel mojado, aunque se registran incumplimientos en precios. Pero llega el anticipo por la Xunta de los pagos de las ayudas de la PAC a los ganaderos gallegos por importe de 69,7 millones, el desbloqueo de las ayudas procedentes de la UE o el pago por el ministerio de 300 euros por vaca que se puso en marcha la semana pasada. Ninguna de estas medidas es la salida al problema del sector lácteo. Porque el futuro del sector no puede descansar en las subvencioness y las ayudas de las administraciones. Ha de ser una producción rentable, que la distribución no asfixie.
Portada del año
Angela Merkel va a cerrar este 2015 con una imagen bien diferente a la que la opinión pública fue conformando de ella durante los años duros de la crisis. Este 2015 la deja ligeramente tocada: cuestionada dentro de Alemania y por los suyos, en la misma línea que se sitúan demasiados dirigentes europeos que ceden ante la presión xenófoba cuando no lo son ellos mismos. Sorprendió la respuesta de la canciller alemana a la crisis de los refugiados en Europa. Se agrandó su imagen ante amplios sectores de la opinión pública. Se derritió el hielo con el que parecía recubierta por la política económica. La revista Time la lleva a la portada como personaje del año. Un acontecimiento mediático que siempre circula por todo el mundo. En este caso es, en valoración positiva del personaje, una buena elección.
