El 18 de octubre se celebró el Día Mundial de la Menopausia, una etapa en la vida de la mujer en la que se produce "una disminución de las hormonas que se encargan de la reproducción", explica Lucía Saborido, directora de Saraiva. "Suele llegar sobre los 50 años, aunque a veces no llega hasta los 60". Como ocurre con el principio de la menstruación, no sucede en todas las mujeres igual. Influye el estilo de vida (cuando una persona vive con estrés, la menopausia suele llegar antes) y el componente genético (si la madre tuvo la menopausia con 50 años, la hija la tendrá aproximadamente con esa edad).
Los desarreglos en el ciclo menstrual, así como los sofocos, la apatía en las relaciones sexuales, la tristeza o la ansiedad son algunos de los síntomas. "El proceso puede durar meses e incluso años", señala Saborido, al tiempo que ofrece una serie de consejos para afrontarlo, como mojar los brazos con agua fría para sobrellevar los sofocos, tomar leche y yogur para evitar la descalcificación, beber infusiones de arándanos rojos para prevenir infecciones de orina, no agobiarse con los sofocos y, sobre todo, trabajar la parte mental.
"Hay que ver esta etapa de forma natural y positiva y aceptar, asumir y entender todo lo bueno que nos trae: la madurez, la reflexión, el aprendizaje y la sabiduría. Por último -concluye- quiero agradecer a Carmen su valentía al contar su testimonio sobre una cuestión natural e inherente al proceso de madurez de la mujer, pero sobre la que tan poco se habla abiertamente".
