Opinión

Telefonistas de Génova y Ferraz

ADEMÁS DEL Parlamento, los medios, la calle y el barro de la pancarta, nos chivan que hay otro termómetro fiable de la crisis catalana. Hablamos de las centralitas de Génova y Ferraz, calles de Madrid donde están ubicadas las sedes de PP y PSOE. Cuentan que desde primera hora de la mañana a última de la noche se han multiplicado las llamadas para manifestar acuerdo o desacuerdo con la gestión política del desafío separatista catalán. Las telefonistas aguantan pacientemente los mensajes de militantes, simpatizantes o ciudadanos sin partidismo dando su opinión para que les sea transmitida a Rajoy y Sánchez. Por ejemplo, en Ferraz recibieron muchas peticiones para que el PSOE apoyara el 155. Y en Génova recibieron muchas críticas por la lentitud de Rajoy y muchas felicitaciones cuando activó el paso previo al 155. Incluso en la sede del PP hubo tirones de orejas telefónicos cuando la Audiencia Nacional puso en libertad a Trapero y felicitaciones cuando fueron encarcelados los Jordis, ¿por qué no llamaron a la jueza?

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