EL CONSELL Nacional de ERC decidió el pasado jueves respaldar el acuerdo con el PSOE al que han llegado sus negociadores, que compromete a los socialistas a abrir una negociación entre el Gobierno y la Generalitat para la "resolución del conflicto catalán", sometiendo las conclusiones a una consulta. A cambio, los 13 diputados de Esquerra, pasarán de su no inicial a la abstención, lo que permitirá a Pedro Sánchez ser reelegido presidente en segunda votación mañana martes.
Antes de que conociera la decisión de ERC, y sobre todo una vez que se hizo pública, la derecha política de todos los colores y también los poderes económicos y mediáticos —que no se presentaron a las elecciones— están contra un posible gobierno progresista. Desde hace tiempo, se viene produciendo un ataque generalizado contra este posible pacto que roza lo intolerable, llegando incluso al insulto personal. Pienso que intentan disfrazar las sucesivas derrotas electorales, y quienes no gozan de la confianza de los ciudadanos, han intentado por todos los medios, con mentiras y falsedades desacreditar el acuerdo para una posible legislatura de izquierdas. No ganaron pero actúan como si lo hicieran. En estos momentos y ante la posibilidad de la investidura de Sánchez, se ha recrudecido la campaña contra el candidato y su grupo político, intentando por todos los medios que no cuajara el acuerdo, llegando incluso al filibusterismo político con toda clase de artimañas.
Como pensionista, ciudadano gallego y español, estoy de acuerdo con las medidas económicas y sociales pactadas entre el PSO E y UP porque pueden favorecer a las clases más vulnerables. Los impuestos deben ir en consonancia con los ingresos de cada uno, teniendo que pagar más el que más gane. No creo que un gobierno progresista pueda ser malo para las clases más desfavorecidas, habrá que esperar acontecimientos, pero de lo que estoy seguro es, que otro con la ultraderecha nos llevaría al pasado. Es suficiente con echar un vistazo a lo que está ocurriendo, en Madrid, Andalucía o Murcia, donde PP y Cs gobiernan al dictado de lo que dice Vox aunque digan lo contrario. Mientras, a la hora de escribir este artículo, algunos deshojaban la margarita sobre la decisión sobre su voto, por eso habrá que esperar a última hora para salir de dudas.Ç
Conclusión, los que recriminaban al presidente en funciones, su incapacidad para conseguir apoyos y formar gobierno, una vez que lo puede alcanzar, también lo critican por apoyarse en la abstención de ERC, cuando en sus manos estaba evitarlo. Pero les interesaba continuar con el bloqueo e ir a otras elecciones, de esta forma y por aburrimiento de los ciudadanos, igual consiguen ganar alguna vez de nuevo no comen ni dejan comer. Ante la duda razonable visto los acontecimientos: ¿Será Pedro Sánchez investido presidente mañana? Fin de la cita.
