Opinión

¿Qué pasa en el mundo?

EN 1869 el director del entonces influyente New York Herald encomendó al periodista Henry M. Stanley la misión de encontrar en África al explorador y misionero escocés David Livingstone al que se daba por desaparecido o muerto después de cinco años sin que estableciera contacto alguno con su país.

Dos años más tarde, el reportero tuvo noticias de él y contó que al encontrarlo en la localidad tanzana de Ujiji "caminé hacia él, me quité el sombrero y dije: Doctor Livingstone, supongo". La leyenda añade que, tras el amable recibimiento, el explorador preguntó a Stanley: "¿Qué pasa en el mundo?".

¿Qué está pasando ahora en el mundo y en España? De eso habló el Rey en la última parte del mensaje de Navidad cuando invitó a "mirar hacia el mundo que nos rodea y darnos cuenta por dónde va" para pensar en la España que queremos.

La vida del país y la nuestra les trae sin cuidado porque ellos, acomodados en sus escaños, solo buscan su supervivencia política

Un mundo que el Monarca prevé de grandes desafíos políticos, económicos, sociales y personales debidos, sobre todo, a los "avances de la tecnología que condicionan nuestras vidas". No se trata solo de una revolución tecnológica, es algo mucho más profundo, "es un nuevo modelo de mundo que traspasa fronteras, sociedades, generaciones y creencias".

No siempre somos conscientes, pero estamos viviendo en directo una revolución -menos violenta que la francesa y más limpia que la industrial- que remueve los cimientos de la vida familiar y social; de la empresa, el comercio y la industria; de las universidades y centros de formación; transforma los procesos productivos, incide en los empleos y determina las relaciones laborales. "Nunca antes en la historia de la Humanidad y en tan corto espacio de tiempo se habían producido cambios tan grandes", dijo el Rey.

Cambios profundos que hay que gestionar -como individuos y como país- asumiendo el protagonismo necesario para adaptarnos a esa realidad, tarea en la que la educación tiene un papel clave, como señaló el Monarca.

Este certero diagnóstico real no fue comentado por los portavoces políticos que, diga lo que diga el Rey, repiten como papagayos la valoración del mensaje de años anteriores. Lo que pase en el mundo, que la llamada "sociedad de la inteligencia" esté cambiando radicalmente la vida del país y la nuestra les trae sin cuidado porque ellos, acomodados en sus escaños, solo buscan su supervivencia política que está vinculada al corto plazo electoral. Asusta pensar que quienes nos gobiernan no quieran ver lo que está ocurriendo.

Comentarios