Este pasado jueves día 25 de noviembre fue la fecha de conmemoración, que no celebración, del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
En un actual informe de ONU (Organización de las Naciones Unidas), que no es cualquier "panfleto", nos indica la espeluznante cifra de casi 1 de cada 3 mujeres ha sufrido abusos a lo largo de su vida… Y en tiempos de crisis ese número aumenta, como se vio durante la pandemia de covid-19 y las recientes crisis humanitarias, conflictos y desastres climáticos.
Ese nuevo informe de ONU Mujeres, basado en datos de 13 países desde la pandemia, recoge que 2 de cada 3 mujeres padecieron alguna forma de violencia o conocían a alguna mujer que la sufría. Por desgracia, solo 1 de cada 10 dijo que recurriría a la policía en busca de ayuda. La información al respecto, es escalofriante.
Detener esta violencia comienza por creer en las sobrevivientes, adoptando enfoques integrales e inclusivos que aborden las causas fundamentales, transformen las normas sociales dañinas y empoderen a las mujeres y las niñas. Al respecto de lo escrito se debe seguir invirtiendo en servicios esenciales en los sectores policial, judicial, sanitario y social, y con suficiente financiación para la lucha por los derechos de las mujeres, pudiendo poner fin a la violencia de género.
A fin de sensibilizar sobre esta monstruosidad, este año 2021 la ONU promueve el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer con el lema: ÚNETE: Pinta el mundo de naranja: pon fin a la violencia contra las mujeres hoy; y lo hace para visibilizar el naranja, color estrella de las campañas para representar un futuro más brillante y libre de violencia contra mujeres y niñas. Este año también se ha querido hacer hincapié en la propia campaña ÚNETE, la que desde 2013 lidera el Secretario General y administra ONU Mujeres, la que proclama cada día 25 de cada uno de los 12 meses del año como el Día Naranja, un día para actuar a favor de generar conciencia y prevenir la violencia contra mujeres y niñas.
Pero al lado de esta actividad de prevención, de nuevo reiterar que, un año más, tenemos que señalar este Día en nuestro calendario para poder alzar la voz nuevamente por aquellas que no tienen fuerza para hacerlo, por las que dejaron atrás la pesadilla de sus maltratadores y aquellas a las que, esta violencia les costó la vida.
La Violencia de Género es uno de los problemas más importantes que tienen los países de la UE, las cifras son insoportables, en España más de 1.100 mujeres asesinadas en los últimos 15 años, sabiendo que esto es sólo la punta del iceberg.
Es un día para recordar a estos niños, a estas madres que ya no pueden defenderse y a todas las que todavía pueden salir del maltrato.
Desde Mujeres en Igualdad, (federación nacional que agrupa a más de 33.000 mujeres y de la que soy activista), como todas y cada una de las mujeres que la conformamos, queremos hoy, como cada día, volver a comprometernos con las víctimas. Siempre contarán con nuestro respaldo, nuestro apoyo y nuestra ayuda salir de la violencia y recuperar su vida y la de sus hijos.
Hoy domingo y a lo largo de una andaina organizada por ASAMPO recorriendo Pontevedra, mi recuerdo será para todas las víctimas, y muy especialmente, a las 37 mujeres asesinadas en lo que llevamos de año, a los 5 menores que perdieron la vida a manos de sus propios padres, y a los 24 menores huérfanos de esta sinrazón.
La violencia de género sigue siendo la cara más dura y más cruel de la desigualdad que, por desgracia, continúan padeciendo las mujeres en todos los países de nuestro entorno. Las mujeres siguen siendo asesinadas por el hecho de serlo. Una violencia de no deja de crecer en todas sus manifestaciones, con una multiplicación de la violencia sexual, cada vez más numerosa, más cruel y que se ceba con nuestras adolescentes. Una violencia contra los menores que la sufren en sus hogares, que interiorizan y normalizan, que les impide crecer con libertad, seguridad y paz.
Y lo que ya me parece inconcebible, con la cantidad de información y formación que se está invirtiendo, es el aumento de la violencia entre la juventud. Les doy un dato para reflexionar al respecto: en 1963 una jovencísima Leslie Gore cantaba Tú no eres mi dueño, tema que ya entonces se instituyó en un himno para abanderar la lucha por los derechos y libertades de las mujeres… Y hoy, 58 años después, nuestra juventud (y los no tanto) se regodea y retoza a ritmo de unas canciones de letras denunciables contra la dignidad de la mujer… Para "hacérnoslo mirar", ya que sobre este aumento de violencia de género entre los adolescentes hay que actuar a la de ya, porque son el futuro y porque merecen relaciones sanas donde prime el respeto, la libertad y la igualdad.
La Eliminación de la Violencia contra la Mujer, es prioritario entre las mujeres, pero no podemos hacerlo solas.
Yo entiendo el feminismo como integración, en dónde los hombres tienen y deben ayudar e implicarse en esta desgracia social.
El día 25 de noviembre un amigo escribía en sus redes sociales que este día debería de ser todos los del año, ya que no podemos bajar la guardia en tal lacra social. Le doy la razón, aunque a mí me gustaría que ya no tuviésemos que conmemorar nada de esto y quedar al fin libres. Por un lado, las mujeres, las niñas y los niños; y por otro, el calendario, sin días naranja y violeta.
