EL 12 de junio de 1817, un artefacto de dos ruedas en línea recorrió en poco más de una hora los algo más de 17 kilómetros de ida y vuelta que separan las localidades de Mannheim y Schwetzingen. "Laufmaschine" –máquina andante- era según su inventor el nombre del, para su época, extraño artilugio. Posteriormente, en honor de su creador fue rebautizado como "Draisiana". Era la precursora de la bicicleta. Con actos en diversos lugares del planeta estamos inmersos en el segundo centenario de la invención de la bicicleta por Karl Friedrich Christian ludwig, barón Drais von Sauerbronn.
El "año sin verano", consecuencia de la erupción del volcán Tambora en Indonesia y sus tremendas anomalías climáticas globales, jugó un papel decisivo en la aparición de aquel vehículo sin tracción animal. Ante la pérdida generalizada de las cosechas, para subsistir fue necesario sacrificar animales, entre ellos los caballos. La bicicleta no fue la única secuela de aquel "invierno volcánico". También fueron herencias suyas Frankenstein de Mary Godwin –posteriormente Mary Shelley-, El Vampiro de John William Polidori, llevado posteriormente a la pantalla por Bram Stoker, el poema Obscuridad de lord Byron, junto a los magistrales atmosféricos atardeceres pintados por Turner.
La paternidad de la bicicleta está envuelta en la manipulación y la tergiversación. Resulta evidente la fabricación de rudimentarias máquinas con ruedas en el Antiguo Egipto, China o Roma. Durante tiempo, leonardo da Vinci fue considerado el inventor moderno de la bicicleta debido a un boceto de su Codex Atlanticus. Sin embargo, el estudio realizado por el profesor
Hans-Erhard lessing en 1997 demostró que se trataba de una falsificación introducida en la obra entre 1967 y 1974 a raíz de su restauración a partir de finales de los 60. También durante décadas se mantuvo el embuste de la invención del Celerífero en 1791 por el conde Mede de Sivrac. Las investigaciones de Max J.B. Rauck, Gerd Volke y Felix R. Paturi demostraron que el citado noble nunca existió y él y su artefacto fueron una creación intelectual del ultra nacionalista francés louis Baudry de Saunier en 1891, dolido por la humillante derrota sufrida por Francia en la Guerra Franco-Prusiana de 18701871.
La "Laufmaschine" no fue el único invento de Drais. Entre otros, ideó un aparato para grabar en papel las notas musicales, un estenógrafo –máquina de escribir- de 16 caracteres, un vehículo de cuatro ruedas propulsado por fuerza humana -primero a pedales y después por un cigüeñal-, una máquina para picar carne... También era un hombre de arraigadas convicciones demócratas. Apoyó los movimientos revolucionarios de 1848, renunció públicamente a su título nobiliario, y se convirtió en el ciudadano Karl Drais. Después de la derrota revolucionaria, fue obligado a recuperar el título y sus bienes quedaron embargados. Karl Friedrich Christian ludwig, barón Drais von Sauerbronn, falleció en 1851 en la indigencia económica. Dos siglos después, su hija más relevante, la bicicleta, goza de una espléndida salud.
