Opinión

Trabajar con un máster

FINALIZARON EL GRADO en 2013 y decidieron proseguir los estudios. En muchos casos, sus padres tuvieron que hipotecarse en un contexto económico sumamente difícil. En el curso siguiente realizaron un máster. Ahora, un estudio de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), la Fundación Bancaria 'la Caixa' y la Cátedra Unesco de Gestión y Política Universitaria de la Universidad Politécnica de Madrid se ha interesado por su situación. Para tal fin se ha llevado a cabo la considerada mayor muestra realizada hasta el presente sobre este tipo de trabajos. En representación de un total de 47.182 egresados de 50 universidades españolas, 6.738 fueron los preguntados. La encuesta ha cubierto todo el espectro universitario: universidad pública, privada, presencial, semipresencial y a distancia. Los resultados del Barómetro de empleabilidad y empleo universitario, presentado el último día de febrero, no pueden considerarse precisamente alentadores. Precariedad laboral, sobrecualificación, futuro carente de perspectivas ilusionantes y lleno de pesimismo..., son constantes que emanan de trabajo.

El gran titular del estudio resulta demoledor: después de haber realizado un grado y un máster, casi el 27% de los titulados no es ni mileurista. Paupérrimo resulta el número de quienes han alcanzado una buena posición económica, pues únicamente el 1,25% percibe un salario comprendido entre los 4.501 y los 6.000 euros. En la franja de 3.001 y 4.500 euros encontramos un ridículo 4,37%. Los tantos por ciento de dos dígitos aparecen a partir de ingresos inferiores a los 3.000 euros. 13,1% entre 2.100 y 3.000, 18,4% de 1.600 a 2.000, 18,5% para el tramo de los 1.201 y 1.600 euros y 16,3% son quienes perciben 1.001 y 1.200 euros. Surge entonces la cohorte más numerosa, la de quienes no alcanzan los mil euros. De ellos, un 8,8% gana menos de 600 euros al mes. Pero no son los peor situados. Ese lugar, en teoría, debe corresponderle al 11,4% que se encuentra con una beca, realiza prácticas o disfruta de un contrato de formación.

La sobrecualificación es una característica actual del sistema formativo español. Los estudios la encuentran a todos los niveles. También en el mundo de los máster. Según el barómetro, un 30,88% de los entrevistados afirman poseer un nivel de conocimientos superior al requerido por el trabajo ejercido. Artes y Humanidades son las áreas donde el estudio localiza una mayor disfunción. Rasgo llamativo del análisis es el pesimismo mostrado por una parte considerable de nuestros jóvenes mejor preparados. Tres de cada diez entrevistados no muestran ninguna duda sobre cuál va a ser su situación en los próximos cinco años: igual o peor, piensan ellos. Como consecuencia, un 32% tiene clara la solución: salir de España para poder desarrollar en plenitud su carrera profesional. Por desgracia, el estudio ratifica la mejor vía en España para conseguir un empleo. Más del 50% de los entrevistados consiguieron trabajo a través de los contactos personales. También en el mundo de los máster priman los conocidos.

Comentarios