Diez cementerios singulares de Galicia que visitar por Todos los Santos

Os proponemos una ruta por el más allá en la que conocer desde auténticos museos al aire libre hasta el único camposanto sin muertos o el que ha logrado dar un toque de alegría a la muerte
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Tres de los cementerios más singulares de Galicia. DP

Este fin de semana, con motivo del Día de Todos los Santos, los cementerios de Galicia se llenarán un año más de gente y flores, manteniendo viva la tradición de recordar a los seres queridos que ya no están entre nosotros. 

  1. Cementerio de San Amaro, A Coruña: donde el descanso eterno tiene vistas al mar
  2. Cementerio de San Froilán, Lugo: aquí podemos ver uno de los mejores monumentos funerarios de España
  3. Cementerio de los ingleses, Camariñas: el recuerdo de un dramático naufragio
  4. Cementerio de Santa Mariña de Dozo, Cambados: el más melancólico del mundo
  5. Cementerio de San Francisco, Ourense: un lugar de inspiración para escritores... y roqueros!
  6. Cementerio de Adina, Iria Flavia (Padrón): el más poético de Galicia
  7. Cementerio de Santa María a Nova, Noia: donde las lápidas nos cuentan a qué se dedicaban sus moradores
  8. Panteón de Galegos Ilustres, en Santiago: donde reposan desde Rosalía a Castelao
  9. Cementerio de César Portela, en Fisterra: un camposanto de diseño... sin muertos
  10. Cementerio de Colores de Dumbría: donde el más allá tiene un toque de alegría

Además de su valor religioso y espiritual, hace tiempo que los camposantos han dejado de ser solo un lugar de silencio y muerte al convertirse en un reclamo turístico, llamando muchos la atención por su diseño, historia, enclave o incluso por quienes descansan en ellos.

Es el necroturismo, también conocido como turismo funerario, que para nada es una cuestión macabra, sino que pone en valor el patrimonio artístico, histórico, cultural y arquitectónico de los cementerios. Y es que muchos de estos espacios son auténticos museos al aire libre, y también una forma de acercarse a la historia y memoria de su ciudad o pueblo.

Es el caso de Galicia, hay numerosos camposantos que merecen una parada. De hecho, cinco de ellos están reconocidos por la Asociación de Cementerios Significativos de Europa por su singularidad arquitectónica y valor patrimonial. Aparecen en este exclusivo club el de los Ingleses de Camariñas, el de Santa Mariña de Dozo de Cambados, el de San Francisco de Ourense, el de San Amaro de A Coruña y el de San Froilán de Lugo. Estos dos últimos, están incluidos, además, en la Ruta de Cementerios Europeos.

Así pues, en este fin de semana en el que los camposantos se convertirán de nuevo en protagonistas, os invitamos a visitar, o al menos conocer de cerca, diez de los más singulares de la comunidad. Un paseo por el más allá en el que ver estos lugares desde otro punto de vista, descubriendo su rica arquitectura, los personajes ilustres que en ellos reposan o incluso las curiosidades que rodean su historia.

1. Cementerio de San Amaro, A Coruña: donde el descanso eterno tiene vistas al mar

Cementerio de San Amaro, en A Coruña, con sus espectaculares vistas al océano. CONCELLO DA CORUÑA
Cementerio coruñés de San Amaro, con sus espectaculares vistas al océano. CONCELLO DA CORUÑA

Este es uno de los cinco camposantos más antiguos y singulares de Europa, inaugurado en 1813 después de que se prohibiesen, solo un año antes, los entierros en las iglesias y su entorno.

Fue así como A Coruña proyectó la construcción de San Amaro en un emplazamiento con vistas al mar, a las afueras de lo que entonces era la ciudad.

Una curiosidad de este camposanto, catalogado por National Geographic como uno de los más bonitos del planeta por sus espectaculares vistas al Atlántico, es que se divide en tres zonas: una religiosa, otra civil y la británica, que es privada y está cerrada al público.

¿Y cuál es la historia de este pequeño pedazo del Reino Unido en A Coruña? Esta se remonta al año 1867, cuando el cónsul británico en Galicia compró un terreno en esta necrópolis coruñesa para establecer un cementerio privado para los británicos fallecidos en la ciudad.

Más de 200 personalidades gallegas descansan también aquí. Así, entre las lápidas encontramos nombres de escritores como Pondal (autor de la letra del Himno de Galicia), Curros Enríquez o Murguía (cinco de los hijos que tuvo con Rosalía de Castro también están en San Amaro); de pintores como Luis Seoane o de músicos como Pucho Boedo.

Como curiosidad, aquí también yace la hermana pequeña de Picasso, fallecida a los 7 años en A Coruña a causa de una difteria.

Entrar en el cementerio de San Amaro es recorrer pasillos llenos de arte. Desde obeliscos egipcios hasta capillas modernistas, pasando por panteones neogóticos o jónicos y un dolmen con un cruceiro enraizado como el que destaca en la sepultura del regueifeiro Pena.

2. Cementerio de San Froilán, Lugo: aquí podemos ver uno de los mejores monumentos funerarios de España

Fotografía antigua del cementerio de San Froilán en 1960. ARCHIVO EL PROGRESO
Fotografía antigua del cementerio lucense en 1960. ARCHIVO EL PROGRESO

Lugo cuenta con un cementerio municipal emblemático que data del año 1948, fiel depositario de la memoria histórica de la ciudad.

Cuenta con un interesante conjunto de construcciones funerarias que fueron trasladadas desde el antiguo cementerio de Magoi, hoy desaparecido, "lo cual le confiere su valor artístico e histórico", subraya el Concello.

Situado a 500 metros del Camino Primitivo de Santiago, es obra del arquitecto racionalista Eloy Maquieira "y destaca por su limpia ordenación espacial".

Así lo considera Turismo de Galicia, que celebra que el de San Froilán es un cementerio "muy activo", al organizar desde concursos de fotografía a visitas guiadas, lecturas dramatizadas, etc. De hecho, en 2023 el Concello celebró su 75 aniversario con una exposición fotográfica sobre la historia de los enterramientos en Lugo.

El camposanto lucense alberga un patrimonio histórico importante, con mausoleos de gran interés arquitectónico y sepulturas de algunos de los personajes más ilustres de Lugo, como Juan Montes. 

En la inauguración de la exposición As necrópoles lucenses: do Cemiterio Xeral de Magoi ao Cemiterio Municipal de San Froilán, la edil de Participación, Cristina López, reivindicaba en El Progreso el interés patrimonial e histórico del camposanto, que tiene mausoleos de gran valor como el de García Abad o la capilla neogótica de mediados del XIX que perteneció a García Abad y que en 2015 recibió un premio como mejor monumento funerario de España.

 

3. Cementerio de los Ingleses, Camariñas: el recuerdo de un dramático naufragio

Cementerio de los ingleses, en la localidad coruñesa de Camariñas. EP
Cementerio de los Ingleses, improvisado en su día junto al mar en la localidad coruñesa de Camariñas. EP

Incluído al igual que los dos anteriores en el itinerario cultural de la Ruta Europea de Cementerios Singulares, el conocido como Cementerio de los Ingleses es una necrópolis improvisada en la que la belleza de su salvaje ubicación impacta tanto como su trágica historia.

Y es que el origen de este cementerio se remonta al naufragio del buque inglés The Serpent en el 1890, del que tan sólo hubo tres supervivientes de sus 175 tripulantes. 

Dada la magnitud de la tragedia, con la gran cantidad de cadáveres que escupió el mar durante semanas, se decidió que lo mejor era enterrar los cuerpos allí mismo, cerca del lugar del siniestro.

Algo que hicieron los propios vecinos de la localidad coruñesa de Camariñas y el entonces cura de Xaviña, creando así un pequeño camposanto junto a la costa para reposo a las víctimas de la marina británica.

Como curiosidad, en agradecimiento a la comunidad de Camariñas por la ayuda prestada, también a los tres supervivientes, el Lord Commissioner of the British Almiralty agasajó al párroco con una escopeta, al alcalde con un reloj de oro y al pueblo con un barómetro.

El cementerio está dispuesto con los oficiales enterrados en el centro y a día de hoy sirve como homenaje a todas las víctimas que se ha cobrado el mar en la Costa da Morte, según reza un monolito conmemorativo en el lugar, donde también yacen marineros de otros naufragios.

 

4. Cementerio de Santa Mariña de Dozo, Cambados: el más melancólico del mundo

Cementerio de Santa Mariña de Dozo en Cambados. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
Cementerio de Santa Mariña de Dozo, en Cambados. JOSÉ LUIZ OUBIÑA/DIARIO DE PONTEVEDRA

En el sur de Galicia encontramos un camposanto famoso por ser, en palabras de Álvaro Cunqueiro, "el cementerio más meláncolico del mundo". Se trata del de Santa Mariña de Dozo, en la localidad pontevedresa de Cambados.

Situado en el Monte de la Pastora, tal y como tiene recogido Diario de Pontevedra "destaca porque parte de él se ubica en el interior de las ruinas de un antiguo templo de estilo gótico marinero construido en el siglo XVI".

A mediados del siglo XIX, esta iglesia, que había sido levantada sobre las ruinas de una ermita románica del siglo XII, cayó en desuso y décadas más tarde se desplomaron la techumbre y algunos muros. A partir de entonces, el cementerio exterior se fue introduciendo dentro de las ruinas del templo, diseminando las tumbas por todos sus rincones.

Según destaca Turismo de Cambados en su web, en 2014 las ruinas de Santa Mariña de Dozo fueron elegidas como el tercer monumento funerario más importante de España. En el que, por cierto, quiso ser enterrada Josefina Blanco, esposa de Valle-Inclán, al lado de su hijo.

5. Cementerio de San Francisco, Ourense: lugar de inspiración para escritores... y roqueros!

El cementerio municipal de San Francisco en Ourense con dos de sus sepultureros, en una foto de 2014. BRAIS LORENZO (EFE)
El cementerio ourensano de San Francisco, con dos de sus sepultureros en el año 2014. BRAIS LORENZO (EFE)

Inaugurado en 1834 en las laderas del Montealegre, desde este camposanto se divisa toda la ciudad de As Burgas.

Prototipo de cementerio burgués del siglo XIX, su interés radica tanto en la belleza y monumentalidad de sus sepulturas (obra de artistas como Piñeiro, Víctor Macho, Faílde, etc.) como en sus moradores, ya que aquí descansan grandes nombres de la literatura, las artes y el pensamiento, como los escritores Blanco Amor, Otero Pedrayo, Vicente Risco o Lamas Carvajal, entre otros.

A lo largo de su historia, el cementerio de San Francisco de Ourense cautivó a poetas y artistas ourensanos que encontraron en él su último lugar de reposo. Hasta el mítico grupo de rock Los Suaves le dedicó un disco! El San Francisco Express, "en el que todos los personajes están enterrados aquí, y en las canciones contamos las que creo que pudieron ser sus historias, entendiendo por la vida que es como un tren", explicó en su día Yosi Domínguez, cantante y compositor de la banda.

Además de estar incluído en la prestigiosa ruta europea, esta necrópolis ourensana fue declarada en el año 2000 Bien de Interés Cultural (BIC) y cuenta con su propia asociación de amigos.

 

6. Cementerio de Adina, Iria Flavia (Padrón): el más poético de Galicia

Cementerio de Adina, en Iria Flavia (Padrón). TURISMO DE GALICIA
Cementerio de Adina, situado en Iria Flavia (Padrón). TURISMO DE GALICIA

Esta es una parada obligada para los amantes de las letras, pues estamos ante el lugar elegido por Rosalía de Castro para descansar eternamente (aunque posteriormente sus restos fueron trasladados al Panteón de Galegos Ilustres, en Santiago) y en él también reposa un Premio Nobel de Literatura.

El cementerio de Adina está situago junto a la Iglesia de Santa María la Mayor (antigua colegiata) de Iria Flavia, en el municipio coruñés de Padrónuno de los primeros templos marianos del mundo.

Cuenta entre sus muros con dos cruceiros y cuatro olivos centenarios que forman parte del Catálogo de Árbores Senlleiras de Galicia. A la sombra de uno de ellos descansa para siempre Camilo José Cela.

Tanto al camposanto como a los olivos funerarios hizo alusión Rosalía de Castro en uno de sus poemas, incluído en el libro Follas Novas.

[…] O simiterio da Adina
n’hai duda que é encantador,
cos seus olivos escuros
de vella recordazón […]

[…] Moito te quixen un tempo,
simiterio encantador,
cos teus olivos escuros,

máis vellos que os meus abós […]

Aunque los restos de la escritora fueron trasladados al Panteón de Galegos Ilustres, en el cementerio padronés se conserva una lápida en su honor que recuerda que reposó allí entre 1885 y 1891. Se trata de una lápida de piedra cuya inscripción reproduce otros versos suyos: "Moito te quixen un tempo/cemiterio encantador/moito te quixen e quérote/eso ben o sabe Dios".

 

7. Cementerio de Santa María a Nova, Noia: donde las lápidas nos cuentan a qué se dedicaban sus moradores

Lápidas medievales expuestas en Santa María A Nova de Noia. TURISMO DE GALICIA
Lápidas medievales expuestas en Santa María A Nova de Noia. TURISMO DE GALICIA

El cementerio de la localidad coruñesa de Noia está al lado de la iglesia, de estilo gótico marinero, que es muy visitada precisamente por su famoso y singular camposanto.

Y es que sus lápidas gremiales y sarcófagos medievales lo han convertido en uno de los más importantes de Europa, puesto que tanto la historia como los oficios del pueblo están allí labrados en piedra.

Más de quinientos sepulcros y lápidas de entre los siglos XIV y XIX cuyas inscripciones indicaban desde el gremio al que pertenecía el fallecido (con herramientas propias de canteros, herreros, zapateros o marineros) al estatus social y familias a las que pertenecían. 

Un auténtico tesoro patrimonial e histórico que atrae cada año a numerosos visitantes, ya que Santa María A Nova acoge una exposición única y permanente. Si os parece un buen plan para este fin de semana, en el que de paso podríais aprovechar para visitar la hermosa villa de Noia, el Día de Todos los Santos (1 de noviembre) y el Día de Difuntos (2 de noviembre) permanecerá abierta de 10.00 a 21.00 horas.

 

8. Panteón de Galegos Ilustres, en Santiago: el lugar en el que reposan desde Rosalía a Castelao

Sarcófago con los restos mortales de Castelao, en el Panteón de Galegos Ilustres. PEPE FERRÍN (AGN)
Sarcófago con los restos mortales de Castelao, en el Panteón de Galegos Ilustres. PEPE FERRÍN (AGN)

El cementerio de Bonaval, al lado del convento de Santo Domingo de Bonaval, en Santiago de Compostela, fue inaugurado en 1847, y continuamente ampliado, hasta dejar de tener uso funerario en 1960. Tiempo después, se ha convertido en un magnífico parque, rehabilitado por Siza, que conserva estructuras funerarias vacías.

Pero en la iglesia del convento podemos visitar el Panteón de Galegos Ilustres, donde están personajes de la talla de Rosalía de Castro, Alfredo Brañas, Cuevillas, Asorey, Fontán o Castelao.

Fue con el traslado de los restos de Rosalía desde Iria Flavia al nuevo mausoleo de Bonaval en 1891, cuando se fue fraguando la idea de convertir la iglesia de San Domingos en un panteón que acogiese otras personalidades destacadas.

Símbolo de la identidad del pueblo gallego y de su continuidad histórica, el Parlamento de Galicia, del que depende este espacio desde 2023, define el Panteón de Galegas e Galegos Ilustres como "el espacio físico destinado a honrar y perpetuar la memoria de las personas que hayan contribuido significativamente a la afirmación de la identidad de la comunidad, al conocimiento de esa identidad y a su defensa, así como al desarrollo del progreso del pueblo gallego en particular y de la humanidad en general".

9. Cementerio de César Portela, en Fisterra: un camposanto de diseño... sin muertos

Cementerio diseñado por César Portela en Fisterra, que sigue vacío casi 30 años después. TURISMO DE GALICIA
Cementerio de Portela en Fisterra, vacío casi 30 años después. TURISMO DE GALICIA

Para encontararnos con cementerios de diseño tenemos que viajar de nuevo hasta la Costa da Morte. 

Por ejemplo, en Fisterra, el célebre arquitecto pontevedrés César Portela es el autor de un moderno camposanto que ha sido premiado y reconocido internacionalmente, si bien casi 30 años después de haberse construído nadie está enterrado en esta obra de arte.

¿El motivo? Ninguno de los gobiernos locales que pasaron por el Ayuntamiento fisterrán en todo este tiempo han sido capaces de ponerlo en marcha, estando a día de hoy todavía inacabado.

Compuesto por cubos de granito frente al océano que parecen evocar los contenedores de un barco naufragado, cada uno contiene 12 nichos con vistas al fin del mundo.

Pero este camposanto tiene la singularidad, o el sinsentido, de ser un cementerio sin muertos. Y eso a pesar del objetivo que buscaba Portela con su diseño y construcción, como recuerda en su página web: "Lo primero que quería era ofrecer a unos muertos el descanso que se merecen en un lugar sublime en el que la arquitectura fuera capaz de fundirse positivamente con la naturaleza, igual que lo han hecho en ese mismo lugar, desde siempre, la tierra, el mar y el cielo".

Lástima que, a día de hoy, continúe abandonado e invadido por la maleza. Eso si, cada año atrae a peregrinos y turistas de todo el mundo.

 

10. Cementerio de Colores de Dumbría: donde el más allá tiene un toque de alegría

Cementerio Muncipal de Dumbría, conocido como de Colores. CONCELLO DE DUMBRÍA
Camposanto municipal de Dumbría, conocido como Cementerio de Colores. TURISMO DE DUMBRÍA

Y como para gustos los colores, mientras que en el camposando de Fisterra no hay nadie enterrado, el policromático del vecino concello de Dumbría es un éxito de ventas: los más de 200 nichos ya están vendidos y hay lista de espera. Otro ejemplo de diseño arriesgado, pero que en este caso triunfó.

Se trata del original Cementerio de Colores, proyectado por la también arquitecta pontevedresa Rosana Pichel. Los amantes de la arquitectura contemporánea disfrutarán visitando una obra que rompe con la tipología tradicional de cementerio de fríos colores grises, logrando dar un ápice de vida y alegría al arte funerario. ¿Os imagináis ser enterrados en un nicho naranja butano o rosa fucsia?

También destacan las cubiertas, "que tratan de imitar, a su modo, los árboles que rodean el lugar", explica Turismo de Dumbría, desde donde nos cuentan que ya se han acostumbrado al hecho de ver llegar al cementerio "autobuses cheos de xente de excursións organizadas; pois xa é un punto turístico máis do concello".

De estilo neoplasticista, al inspirarse su creadora en la obra del artista holandés Piet Mondrian, ya estando en obras tuvieron que ampliarlo dada la alta demanda que tuvo desde el principio. 

Terminado en 2012, estamos ante el cementerio más llamativo de la Costa da Morte. Una explosión de color que da al espacio un aire distinto del que se muestran orgullosos los vecinos. Sin duda pueden presumir de tener un cementerio único; no hay en toda Galicia otro igual!