La caída del dólar y de los precios de la celulosa lastran los resultados de Ence

La compañía pierde 22 millones hasta septiembre y avanza en el desarrollo de su plan de transformación hacia productos de mayor valor
imagen de la factoría de Ence en la ría de Pontevedra. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
imagen de la factoría de Ence en la ría de Pontevedra. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

Ence ha registrado pérdidas de 22 millones de euros en los nueve primeros meses de 2025, un cambio relevante respecto al mismo periodo del año anterior, que venía con beneficios. Las razones son varias y combinadas: en primer lugar, el precio internacional de la celulosa -producto clave en su negocio- ha caído con fuerza, llegando a mínimos de cerca de 1.000 dólares/tonelada en segundo semestre. Esta caída ha reducido los márgenes de la división de celulosa, aún cuando se ha mejorado el volumen y se han reducido costes unitarios. Además, la depreciación del dólar frente al euro ha tensionado las ventas en mercados internacionales, al aumentar en euros los costos o reducir la competitividad en moneda extranjera.

El mercado está generando incertidumbre en los compradores globales de celulosa

Por otro lado, Ence afronta un entorno de aranceles y tensiones comerciales que está generando incertidumbre en los compradores globales de celulosa. Esa circunstancia hace que los clientes retrasen pedidos o ajusten inventarios, lo que impacta en los flujos de venta. Aunque la compañía redujo el coste medio por tonelada de celulosa a 459 €/t en el tercer trimestre y lanzó un plan de eficiencia con un ahorro potencial de 22 €/t, esos esfuerzos no han bastado para compensar el impacto combinado del precio más bajo, moneda desfavorable y menor margen por tonelada.

División de energías renovables

En la división de energías renovables, que Ence también opera con foco creciente en Galicia, los resultados muestran un ebitda acumulado hasta septiembre de 18 millones frente a 21 millones en el mismo periodo del año anterior. La ligera caída se explica por menor producción derivada de trabajos de mantenimiento y de arranque de nuevas instalaciones, que han limitado la generación de energía 'regulada' en el trimestre, reduciendo por ello los ingresos de esa línea de negocio.

Aunque el volumen de ventas de celulosa cayó solo un 1,4 % (732.406 toneladas hasta septiembre frente al año anterior) y en el tercer trimestre se registró un crecimiento interanual del 13%, la clave no está en la cantidad sino en el precio medio de venta, que ha bajado sustancialmente. Ence destaca que ya cuenta con un mayor peso de "celulosas especiales" (de mayor margen) que creció un 30% en volumen, pero esa transición exige tiempo para que el efecto en resultados sea pleno.

La pastera se encamina hacia un modelo más sostenible y de mayor valor añadido

La pastera ha intensificado su proceso de transformación hacia un modelo más competitivo, sostenible y con mayor valor añadido. Las ventas de celulosas especiales supondrán en tres años más del 60% de sus ventas. La puesta en marcha de la nueva producción de celulosa fluff consolida además a Ence como el único productor europeo especializado en este material con fibra corta, con menores costes y una menor huella de carbono que sus competidores.

Apuesta por la biomasa

A esta apuesta industrial se suma el desarrollo de la mayor plataforma de energías renovables de biomasa de la península. La compañía continúa con un plan de eficiencia basado en inteligencia artificial, automatización y reingeniería de procesos, con un potencial de ahorro de 22 euros por tonelada. Con los precios internacionales iniciando ya una recuperación, sin aranceles en Estados Unidos y con paradas técnicas de los grandes productores latinoamericanos previstas en el tramo final del año, Ence confía en darle la vuelta a un ejercicio complicado por factores externos y seguir reforzando su papel como industria tractora en Galicia.