El comité de fábrica de Ence acuerda extender las jornadas de huelga hasta diciembre

CC.OO. solicita la intermediación de la Xunta en el despido colectivo previsto por la compañía, frente al que anuncia la adopción de "todos los mecanismos posibles". La empresa señala que el proceso de restructuración de la plantilla se alargará "hasta 2027". La actividad se reanuda después de seis días suspendida. El próximo parón será el día 21
Ence Comisiones
Carmela Villaverde, Amelia Pérez y Omar Vázquez en la sede de Comisiones Obreras. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

El comité de empresa de la fábrica de Ence en Pontevedra ha decido reconfigurar la huelga tras la decisión de la empresa de iniciar un procedimiento de despido colectivo el próximo día 20. Los doce días de parón previstos en un inicio durante el mes de noviembre, de los que tres ya se han celebrado, se extenderán finalmente hasta diciembre y con la previsión de realizar "mayores convocatorias en función de cómo evolucione el conflicto".

Así lo anunció este jueves el secretario del comité y secretario comarcal de Comisiones Obreras, Omar Vázquez, en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por la secretaria general de Comisiones Obreras en Galicia, Amelia Pérez, y la secretaria general de la Federación de Industria, Carmela Villaverde.

El portavoz indicó que las movilizaciones se enmarcan en la oposición unánime de la plantilla frente a los 39 despidos previstos en la factoría, donde están contratados 282 trabajadores. Según avanzó, los representantes sindicales encararán las negociaciones que comenzarán el próximo jueves con la "intención de no aceptar esos despidos" y con la previsión de recurrir "a todos los mecanismos posibles" para dejarlos sin efecto, incluida la vía judicial. 

Reclaman la mediación de la Xunta

El agente sindical aseguró que las salidas que plantea la empresa con la finalidad de mejorar resultados tiene un impacto "ridículo" en los costes de producción y que el plantel "ha llegado al límite del hartazgo" . "La dirección dice que o aceptamos los 38 despidos o que nos veremos afectados los 280 (...). Nosotros decimos que no renunciamos ni a uno solo de los nuestros", resaltó Vázquez, quien afirmó que el conflicto ha dado lugar " a la mayor unidad de la plantilla en bastantes años".

Frente a la propuesta empresarial de negociar las salidas de una manera informal -como se está haciendo actualmente en la fábrica de Navia-, reiteró que el despido colectivo "debe seguir un cauce legal", con las oportunas justificaciones y mediaciones externas que se requieren para un expediente de regulación de empleo. 

Sobre esto adelantó que se examinará toda la documentación que aporte la empresa, pero que a su vez se emplazará a intermediar en el conflicto a "la Xunta de Galicia y el Partido Popular". Según alegó, "en su momento avalaron la permanencia" por unas inversiones comprometidas por la empresa "que no se cumplieron" y por unos puestos de trabajo "sobre los que ahora tendrán que pedir cuentas". 

Tercer día de huelga en Ence. DP
Trabajadores de Ence en el tercer día de huelga. DP

Vázquez también se pronunció sobre las críticas vertidas por el comité de oficinas de Lourizán. Concretamente, sobre el comunicado emitido por su presidenta, Ana Cedeira (también integrante de CC.OO.), quien acusó al comité de fábrica de arrastrar al ERE a los trabajadores de las oficinas de Pontevedra, Navia y Madrid.

El portavoz aseguró que "el 90%" de los trabajadores de oficinas tienen contratos fuera del convenio y que aceptar la negociación informal de los despidos que planteaba este comité "significaría firmar un cheque en blanco a la empresa". Además, indicó que esas críticas no son compartidas por todos los trabajadores de oficinas y que "es rotundamente falso" que los comités de Navia y Madrid apoyen ese posicionamiento. 

"No es una cuestión exclusivamente laboral"

Por su parte, Amelia Pérez, aseguró que la reestructuración de personal "no es una cuestión exclusivamente laboral", sino que tiene "más variables". La secretaria general de Comisiones Obreras en Galicia recordó que la plantilla "luchó con todas sus fuerzas" para defender la permanencia y que en aquel momento la empresa se comprometió a hacer unas inversiones, "de las que no hay prácticamente nada". 

Asimismo, puso en tela de juicio que "una compañía tan potente" no pueda asumir las pérdidas con las que justifica los despidos, para luego asegurar que el convenio vigente ya permite negociar el impacto que puedan tener la modernización y automatización de procesos que pretende llevar a cabo la compañía "sin necesidad de recurrir a un ERE". 

Paralelamente, incidió en que la normativa vigente permite que la negociación de los despidos se puede llevar a cabo como reclaman los centros de trabajo, distinguiendo así entre el personal de fábrica y el de oficinas. Dicha fórmula se distancia de la que plantea la empresa, la cual ha decidido iniciar dos únicos procedimientos en función de los CIF (Códigos de Identificación Fiscal) existentes. Uno para la fábrica de Navia, donde se ha aceptado negociar informalmente cerca de 90 salidas con medidas voluntarias, como prejubilaciones y bajas incentivadas. Y otro para la fábrica de Pontevedra y las oficinas de Lourizán, Madrid y Navia, en los que las salidas se harán de una forma regulada.  

Por su parte, la secretaria general de la Federación de Industria, Carmela Villaverde, señaló que las empresas auxiliares defendieron en su momento los puestos de trabajo de Ence y su permanencia en Pontevedra y que "ahora tenemos pensado seguir haciendo lo mismo".  

La actividad se reanuda y la empresa responde: "Invertimos 220 millones"

La previsión es que la factoría de Lourizán pueda reanudar este jueves su actividad, después de seis días inactiva. Comisiones mantiene que la decisión de mantener la producción parada en los días sin convocatoria de huelga ha sido "una medida de presión" para los trabajadores, cuyas nóminas dependen en parte de las toneladas de pasta que se produzcan. ¿Qué responde la empresa?

Fuentes oficiales insisten en que la suma de cuatro trimestres consecutivos de pérdidas ha llevado a poner en marcha un Plan de Eficiencia y Competitividad que se llevará a cabo en el periodo 2025-2027 apoyado en dos pilares. Por un lado, en la adopción de soluciones de Inteligencia Artificial y reingeniería y automatización de procesos y, por otro, en la racionalización de los procesos operativos.

La compañía indica que la ejecución de estos proyectos implica una "reducción ordenada" de la estructura de personal que se realizará en el marco de "un procedimiento de despido colectivo que se implementaría hasta 2027". Según añade, estas amortizaciones de puestos de trabajo van acompañadas de inversiones previas para "automatizar tareas o mejorar los procesos actuales", de las que asegura que algunas ya se han realizado este año. 

De forma paralela, señala que continúa con el proyecto Pontevedra Avanza, en el que se contempla una inversión de cerca de 120 millones para acometer actuaciones de mejora previstas en el Marco Estratégico 2024-2028. Las actuaciones se suman, según Ence, a los 220 millones que asegura que ha invertido en la fábrica de Lourizán desde 2015 y de los que 75 se invirtieron en los últimos cinco años. 

Las mismas fuentes precisan que dichas inversiones han estado focalizadas en mejoras de la eficiencia en las instalaciones, dado que más del 35% de los fondos se han dirigido al área de sostenibilidad y, más en particular, a actuaciones medioambientales y vinculadas con seguridad. "Solo en 2025, la compañía suma 17 millones de euros en su biofábrica de Pontevedra destinadas a mejoras de sus instalaciones y la eficiencia de su complejo industrial", remarcan desde la compañía. 

El próximo paro será el día 21

La próxima jornada de huelga prevista por el comité de empresa tendrá lugar el próximo viernes 21 de noviembre. El parón tendrá lugar justo un día después de la reunión con la que se dará salida al período de consultas del expediente de regulación de empleo.

En el caso de Pontevedra, la comisión negociadora de los despidos ya está constituida y los acuerdos que se adopten afectarán no solo al personal de fábrica de Lourizán, sino también a los trabajadores de oficinas de Pontevedra, Navia y Madrid

En el caso de la fábrica de Navia, se llegó a constituir la comisión negociadora pero, según fuentes consultadas, en ese momento los representantes de los trabajadores solicitaron abrir un periodo previo e informal de negociación. La empresa lo aceptó y se está desarrollando en estos momentos. En la última reunión, celebrada el pasado martes, el comité de fábrica de Navia presentó una contraoferta al Plan de Competitividad presentado por la empresa. Este incluye más de 90 despidos y, además de reorganizar puestos, propone prejubilaciones para mayores de 58 años.